Hay luz al final del túnel
Salto inicial ·
Hay que ser optimista respecto al rendimiento azulgrana en la recta final de campaña después de que haya adoptado los preceptos de juego de Neven SpahijaAl final del túnel siempre hay claridad. A veces es una luz minúscula, tan imperceptible que crees que es más un deseo que la realidad. ... Otras, una especie de faro que te alumbra a cada paso. Un paso que se suma a otro para alcanzar el punto final, la salida de ese túnel que se fue recorriendo a lo largo del tiempo. Es evidente que si miras atrás, pierdes de vista su referencia, por lo que conviene no solo no perder el paso sino tener claro que es ahí a donde quieres llegar, a esa claridad final, la que ansiabas desde que iniciaste el camino.
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No queda mucho para llegar al final de temporada, apenas cinco jornadas más los play off, que pueden durar casi un mes más. No es que se alargue el trayecto, sino que la claridad cada vez brilla más, lo que siempre es una buena nueva. Es una claridad que realmente se hace más grande, porque se llega al final y porque puede realmente ser más que una esperanza si se dan los pasos correctos y se hace lo que se sabe hacer.
Cerrada la página de la Euroliga, no gastemos un ápice de energía en mirarla, quedó claro que el paso de Baskonia fue decepcionante. Vale. Queda ahora el reto de la Liga Endesa, al que no se ha de renunciar. Un camino en el que la competitividad en la ACB, reconozcámoslo, está siendo más que interesante. A falta de calidad y talento, la energía de los equipos es máxima y el nivel medio, ese que marca el listón del 'peor' equipo aún con opciones, es más alto que nunca. A estas alturas solo el Barça está confirmado como equipo de play off, el resto aún lo tiene que lograr. Once equipos con opciones de entrar a competir por el título.
En esta igualdad, el Baskonia no es que tenga opciones por nombre, historia, recorrido y plantilla, aunque estas no sean las condiciones de entrada entre los elegidos. Si realmente muestra ese potencial que su calidad individual y colectiva posee tiene ante sí uno de los brillos más soñados por la afición y por el club.
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Pensarán sobre mi optimismo a estas alturas de la temporada, pero hay motivos para serlo. Mire, el equipo ha adoptado ya los principios del juego de Spahija: juego en ritmo en todo el campo, compromiso colectivo en el rebote defensivo, buscar las primeras opciones del ataque desde los indirectos a sus aleros, generar ventajas en el 1x1 para doblar al lado contrario, buscar un pase más en ataque buscando al compañero mejor situado, generar situaciones de tiro sin bote, anticipar la primera línea de pase en defensa, cerrar pasillos interiores en la zona en defensa para llegar antes a las ayudas... Cuando el equipo lo cumple, su juego es lo que se esperaba cuando se escribió la plantilla en el relato titulado 'Baskonia 2021-22'. Puede cometer errores, de hecho los comete, pero si pensamos en esta parte del trayecto final, el equipo hoy en día está más alineado con seguir mejorando estos principios del juego durante más tiempo en cada partido, sin pensar tanto en el miedo a cometer un fallo.
La otra razón poderosa para ser optimista, siempre que el equipo cumpla esta parte del pacto con las expectativas, es que aunque hay muchos rivales en la contienda, salvo el Barça, ninguno tiene las suficientes garantías para ocupar un lugar de privilegio. Todos pueden mejorar sus prestaciones pero también todos pueden ser superados: Real Madrid, en horas bajas, Valencia pensando en Eurocup, Penya y Tenerife sólidos pero con errores, Manresa la sorpresa, … Y esa es la luz que más brilla: que es posible agarrarnos al radiante brillo del premio final en este tramo de llegada de la temporada. Además, la llegada del neozelandés Yannick Wetzell hace que se incorpore una pieza más que interesante a las filas azulgranas. Un arma todavía por descubrir, otro foco de preocupación para el rival.
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