Rodrigo Ely sufre rotura de ligamento cruzado y dice adiós a la temporada

Un palo muy duro para el jugador. Otro. Es la segunda lesión grave que sufre en Vitoria. Ya estuvo ocho meses sin jugar en la temporada 2018-19: sintió una torsión de rodilla durante un amistoso de pretemporada ante el Alcorcón y lo que inicialmente parecía un percance menor se complicó de manera drástica. El propio futbolista solicitó al club permiso para ser revisado en Estados Unidos y el resultado fue «una insuficiencia funcional del ligamento cruzado anterior» que le llevó al quirófano.

El matiz diferencial actual es que el italo-brasileño finaliza contrato con el Alavés en junio de 2021, con un futuro incierto, dada su pérdida de jerarquía en la alineación alavesista. Esta temporada ha participado en ocho de las catorce jornadas ligueras disputadas, solo en seis como titular, y es el decimocuarto jugador en el escalafón de minutos de Pablo Machín.

Es uno de los siete futbolistas albiazules con contrato cuyo vínculo expira en seis meses, que a partir del 1 de enero tendrán libertad para negociar con cualquier otro club. Junto a Ximo Navarro, Tomás Pina, Manu García, Jota Peleteiro, Burgui y Adrián Marín. En una situación económica y social tan delicada, el Alavés ha dejado entre paréntesis los contactos para acometer hipotéticas renovaciones. Solo Ximo Navarro tiene una renovación automática por el número de partidos que dispute este curso. También Tomás Pina tiene una cláusula similar, aunque las cifras en su caso engloban las dos últimas temporadas y, tras la lesión de la pasada, no tiene fácil cumplir con los requisitos de continuidad instantánea. La situación de Ely adquiere ahora un cariz distinto.

También para el equipo supone un serio contratiempo. El brasileño no formaba parte del once de gala de Machín, pero sí era el primer recambio en el eje de la zaga. Lo fue en El Alcoraz para suplir al sancionado Lejeune y lo volvió a ser en Balaídos para cubrir el hueco del lesionado Laguardia. El técnico albiazul se queda ahora con el francés y el maño en primera línea y Tachi en la recámara como único recambio natural. Porque la polivalencia de Ximo también le permite actuar en esa demarcación, ya lo ha hecho muchas veces en Vitoria, pero se ha consolidado en el lateral derecho y, a priori, apunta más a una alternativa de emergencia como, dado el caso, podría serlo también Duarte.

Más atrás en esa baraja de recursos parece quedarse renovar de nuevo el dibujo táctico, retornar al esquema 3-5-2 inicial en el que los dos laterales actuales se sumarían a la nómina de centrales. O la opción del filial, donde el camerunés Stephane Keller, de 19 años, ya ha participado con cierta regularidad en los entrenamientos del equipo.

Sea como fuera, el club está obligado a valorar si acude al mercado de centrales en enero para afrontar la segunda parte del curso. No es fácil, en cualquier caso, dados los condicionantes económicos que limitan los movimientos de la entidad albiazul, como el límite salarial de la plantilla. Solo alguna hipotética salida, complicada también, ampliaría el margen de maniobra.