José Carlos Plaza, en el teatro Ortzai de Vitoria donde ayer presentó su libro. Blanca Castillo
José Carlos Plaza | Director de escena

«Hay mucho amateur en el teatro y la profesión de actor es muy difícil»

Presenta en Vitoria un método en el que transmite su pasión por un oficio «de valientes. Ana Belén es un Stradivarius, con Héctor Alterio me pongo de rodillas»

Sábado, 25 de octubre 2025, 00:04

Lo más parecido a colarse en un ensayo teatral, algo que nunca ha permitido José Carlos Plaza (Madrid, 1943), es leer su 'Tratado de la ... obviedad. La interpretación desde la raíz' (Cátedra), un método para unos profesionales permanentemente expuestos, «portavoces de las inquietudes de la sociedad». En este libro escrito junto a Jorge Torres y Rocío Westendorp vuelca las enseñanzas de William Layton, «el gran científico del teatro español» , y lo que ha aprendido en casi seis décadas como director de escena, el más laureado de su generación.

Publicidad

Con tres premios nacionales (1967, 1970 y 1987) entre otros galardones y títulos imborrables como 'Las bicicletas son para el verano' 'La casa de Bernarda Alba' y las 'Comedias bárbaras' completas que montó en el Centro Dramático Nacional, ayer presentó su libro en una pequeña sala de Vitoria, el laboratorio escénico Ortzai, donde se siente como en casa. «Iker (Ortiz de Zarate) y yo nos conocemos hace años y me enamoré de su historia. Gente que está luchando por un teatro con bastante poca ayuda», dice.

- ¿Qué importancia tienen las salas pequeñas e independientes para la vitalidad del teatro?

- Para mí son fundamentales. Yo nací, me crié y soy quien soy por una sala pequeña que era el Pequeño Teatro aquí en Madrid. El problema es que viven a base de autoexplotarse. Hay muy poca ayuda al hecho cultural de estos grupúsculos tan hermosos, llenos de originalidad, que están aportando savia nueva al teatro.

- En su libro critica «el predominio de la forma sobre el contenido» en los escenarios españoles.

- Últimamente hay mucho esfuerzo por renovar lo exterior, el movimiento, la luz... y se está olvidando lo que se comunica al espectador. Creo que eso es peligroso porque el teatro no nació para epatar ni para asombrar, sino para transformar al espectador. El actor es el que comunica y a veces se olvida eso.

Publicidad

- ¿Qué cualidades definen a un gran intérprete?

- Lo primero es una obviedad, que sean profesionales. Hay mucho amateur en el teatro, mucho arribista, mucho niño, mucha niña. Si los cogen en televisión, ya son actores. Y la profesión de actor es muy difícil: la voz, el cuerpo, el compromiso con la sociedad y con uno mismo. Hay que ser muy sensible y muy valiente.

- Ahora hay más escuelas que antes, pero usted alerta de que se descuida la formación en una herramienta tan importante como la voz.

- En el 90% de las escuelas que yo conozco veo que hay un gran olvido de la voz y de un hecho que a mí me parece fundamental, el traspaso del yo del actor al personaje. Creo que es por la velocidad que la sociedad exige a los actores. Tienen que dar resultados inmediatos y la construcción de un personaje lleva mucho tiempo.

Publicidad

- Ya es difícil encontrar obras en las que los actores no hablen con micrófono.

- Me parece un paso atrás, porque con micrófono el actor habla para sí mismo en vez de proyectar y tocar con su voz al espectador. Se insiste en una absurda y ridícula naturalidad cuando el teatro no puede ser natural. El teatro es falso, es arte, no es una cámara de fotos. Hay que hablar teatralmente y lanzar la voz para que el público la reciba. Y hay un problema mayor, que a veces tampoco se entiende.

- Supongo que será un problema de tiempo y de dinero.

- Es un problema de dinero y de ideología también. La enseñanza tiene que ser pública. Y aparte de eso, se ha quitado la ilusión de la preparación. 'Tú no hagas nada'. 'Habla como tú eres'. Rápido, rápido todo.

Publicidad

- Como espectador, ¿le cuesta encontrar obras que le convenzan?

- Yo veo muchísimo teatro, todo lo que puedo. Los Despiertos han hecho una función de José Troncoso excepcional. El alarde de Andrés Lima con '1936'... Hay cosas muy buenas, cosas irregulares y experimentos que fallan, lo cual es estupendo porque tenemos derecho a equivocarnos. Yo creo que el teatro merece la pena siempre. El esfuerzo de una serie de personas por subir a un escenario hay que apoyarlo.

- ¿Hay más divismo entre los actores o entre los directores?

- En eso no se diferencia mucho el teatro de la gente común. Yo he montado 150 espectáculos y he tenido un par de problemas.

- También el público tiene que poner de su parte. Esos móviles, esas toses...

Publicidad

- Yo considero que el teatro es un acto de amor y a veces la pareja no lo hace bien. El público es un ser vivo. A veces lo hace mal, a veces lo hace bien, como nosotros.

- Defina en pocas palabras a grandes artistas que ha llegado a conocer muy bien: Berta Riaza.

- La mejor, la más perfecta actriz que yo he conocido.

- Concha Velasco.

- La pasión. La maravillosa imperfección.

- Ana Belén.

- Ana Belén es un Stradivarius. Las palabras de Ana son de verdad desde el primer momento.

Noticia Patrocinada

- Lola Herrera, que sigue de gira.

- Lola es la humanidad. Es contacto, vida que traspasa cualquier texto. Vino a la presentación del libro en Madrid y a mí se me caían las gafas. Es un prodigio.

- Y Héctor Alterio.

- Me pongo de rodillas. Héctor ha sido el gran regalo que me ha dado la vida. Capacidad de entrega, humildad. Y una fuerza... El otro día le fui a ver con 95 años, dando un recital de poesía. Cuando terminó, me dio un abrazo y me dijo: ¿Qué hacemos lo próximo?

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad