Música y Ópera: Thomas Adès

El galardón reconoce «su original reinterpretación de la tradición musical occidental en un catálogo que abarca todos los géneros y por su capacidad comunicativa que conecta con públicos diversos»

El XV Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en Música y Ópera ha sido para Thomas Adès por «el extraordinario alcance internacional de su obra, que lo convierte en uno de los músicos más aclamados de nuestro tiempo». El jurado destaca «la capacidad comunicativa de su música, que conecta transversalmente con públicos diversos al tiempo que abre horizontes de futuro» a través de un «extenso catálogo de composiciones que abarca todos los géneros: sinfónico, pianístico, música de cámara, ballet y ópera. Estas cualidades, junto con su intensa actividad como pianista y director, hacen de él una referencia imprescindible en el panorama musical actual», recoge el acta.

Una de las claves de esa amplia conexión con la audiencia es, según Victor García de Gomar, secretario del jurado y director artístico del Gran Teatre del Liceu, «su capacidad de combinar técnicas compositivas contemporáneas con recursos para devolver la emoción y la expresividad desde el escenario a la sala. Consigue crear una perfecta armonía entre el oído y la mente; esto es lo que hace su música enormemente moderna, a través de un lenguaje que conecta con los afectos, enlazando lo racional con lo emocional. Su música necesita ser expresada, no sólo interpretada». Una definición en la que el músico londinense se reconoce: «Creo que la mente racional debe trascenderse para construir algo nuevo. Por supuesto la racionalidad siempre está presente y forma parte del proceso, pero no puedo separar la emoción de la razón».

Francisco Coll, el único discípulo al que Adès ha enseñado composición, destaca que uno de los rasgos que distingue la obra de su maestro es cómo logra el equilibrio entre la parte intelectual, el conocimiento, y el elemento emocional, que es lo que conecta con el público. «Thomas hace suya la idea de que una música ha de ser compleja de escribir y fácil de escuchar».

A los doce años, Adès viajó a Bilbao con su madre –una historiadora del arte especializada en el surrealismo–, una experiencia que le transformó: «España fue el primer país que visité, lo recuerdo muy bien porque salimos en barco desde la costa del sur de Inglaterra a finales de los 70, y nunca he olvidado la sensación de sentirme como un explorador. Eso es algo que siempre tengo en mente en mi trabajo, la idea de navegar hacia un horizonte desconocido», evoca el premiado.

Influencia del surrealismo

Esa doble influencia, la de la cultura española y la del surrealismo, han tenido un importante reflejo en la carrera de Adès. «Dalí creó elefantes con patas de mosquito, es decir, presentó de forma original elementos reconocibles y familiares. Eso es lo que hace Thomas a nivel más abstracto con la música: toma una chacona, un vals o un tango y los reinterpreta de forma totalmente original«, explica Coll. «El surrealismo es algo muy natural para mí. Yo veo la realidad a mi manera», constata el músico británico.

«Thomas hace suya la idea de que una música ha de ser compleja de escribir y fácil de escuchar»

Antes de cumplir la mayoría de edad, el maestro Adès ya había compuesto su Opus número 1, ‘Five Eliot Landscapes’, y estudiaba piano para música de cámara en Hungría con György Kurtág (VII Premio Fronteras del Conocimiento). Una formación que completó en el King’s College de la Universidad de Cambridge. Poco después, en 1995, estrenó su primera ópera, ‘Powder Her Face’, en la que desplegó una amplia paleta de influencias: desde Berg o Stravinsky hasta los tangos de Piazzolla. En 1997 recibió un encargo de Sir Simon Rattle que se convirtió en su pieza sinfónica ‘Asyla’, en la que incorporó estructuras, patrones y ritmos de la música techno. «Toda mi música podría describirse como surrealista. Intento ver más allá de lo físico y pensar en cómo se puede transformar. Como está hecha de aire, puedes hacer lo que te dé la gana, creo que es la disciplina artística más libre, además es ideal para desplazar las fronteras del conocimiento».

El jurado considera que entre sus obras se encuentran «hitos de la música contemporánea como ‘In Seven Days’ (2008), ‘Polaris’ (2011), ‘Tevot’ (2007) y otras composiciones que ya son puntales de repertorio de concierto», como sus óperas. «Componer una ópera es como ser atraído por un agujero negro», asegura el premiado, «lo absorbe todo». A ‘Powder Her Face’ le siguió ‘The Tempest’ (2004), que consiguió aún mayores cotas de aclamación popular, de crítica y de premios. Y en la más reciente, ‘The Exterminating Angel’ (2016), convirtió en paisajes sonoros la angustia y la opresión que Luis Buñuel reflejó en la película ‘El ángel exterminador’. Esta obra se ha representado con gran éxito en Nueva York, Londres y Salzburgo y ha sido la razón de que Adès recalara en España, el pasado marzo, para dirigir su versión sinfónica por encargo de la Orquesta Nacional de España junto a otras siete instituciones internacionales.

«Dirigiendo me siento libre»

«Disfruto mucho dirigiendo mis obras, es como moldear la arcilla de mi propio trabajo», señala el maestro. «El proceso de componer puede ser muy duro, pero cuando dirijo he dejado ese trabajo atrás y me siento muy libre. Componer –continúa– es básicamente una actividad solitaria que realizas durante lo que parecen horas, días, semanas… interminables, en tu casa. La partitura no es más que un mapa de un paisaje sonoro. Cuando la llevo al mundo real y la dirijo, soy capaz de presentarla en un modo idealizado y trato de mostrar con mis gestos cómo quiero que sean esos sonidos. Es maravilloso para mí».

Su cuarta gran composición escénica ha sido el ballet ‘Dante’, donde Adès hace su propia revisión de la ‘Divina Comedia’. «Cuando lees a Dante, es atemporal. En una página está Aristóteles y en la siguiente hay figuras contemporáneas, tienes la sensación de estar fuera del tiempo. Esto es lo que quería transmitir con la música, que puedes caer en ese mundo desde cualquier era, y sentir que siempre te encuentras en el momento actual».