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Algunos de los 'reboots' que han llegado en los últimos tiempos a la cartelera.
Yo, 'reboot'

Yo, 'reboot'

El auge de las películas recicladas, nueva vuelta de tuerca a éxitos del pasado como 'Star Wars' o 'Mad Max', vuelve a evidenciar la crisis creativa de Hollywood

Borja Crespo

Jueves, 25 de febrero 2016, 14:05

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En Hollywood buscan desesperadamente nuevas fórmulas para llevar al espectador a las salas, sobre todo al público juvenil. En su lucha constante por mantenerse en lo alto del negocio del entretenimiento, esquivando las embestidas de la industria del videojuego, que no para de crecer y ya está por delante en el pódium del ocio, amasando pingües beneficios, el cine comercial parece limitarse a reciclar más que inventar, a tirar de viejos éxitos, su lista de grandes hits, para enganchar a la audiencia. No le vale únicamente con rehacer títulos de antaño con pegada, adaptándolos a los nuevos tiempos, esos malditos remakes que nos señalan el paso del tiempo, optando cada vez más por relanzar franquicias, lo que se llama 'reboot' en el argot cinematográfico, léase algo así como "volver a empezar con lo mismo".

Para entendernos rápido, un ejemplo de actualidad es la adaptación de Spider-Man a la gran pantalla, que vive estos días otro proceso de reinyección tras el lavado de cara de las aventuras del conocido Hombre Araña en la era Sam Raimi y la reciente etapa Marc Webb, donde se le insufló un terrible rollo 'Crepúsculo' y sucedáneos al mítico héroe de papel creado por Stan Lee y Steve Ditko. 'The Amazing Spider-Man' invitaba a pensar que estábamos ante una comedia juvenil más que otra cosa: rellenar las arcas está por encima de cualquier atisbo de creatividad y los adolescentes en celo son prioridad. Andrew Garfield ('La red social') fue el elegido para trepar por las paredes y no convenció a la prensa especializada, dado el alto nivel de insipidez del filme que defendía, pero la recaudación fue copiosa -más de 750 millones de dólares en todo el mundo- y torturaron al respetable con una segunda entrega dirigida igualmente por el responsable de la engañosa '(500) días juntos', dejando de lado a los fans del personaje.

El hombre arácnido renueva sus hazañas para el año que viene con Jon Watts tras las cámaras (estimulante su modesto cuento 'Coche policial') y Tom Holland en escena, el niño de 'Lo imposible', lo que indica que bajan todavía más la edad del superhéroe, aunque el joven actor haya crecido desde que sufriera el tsunami de J.A. Bayona.

Michael Bay, el rey del espectáculo grandilocuente no falto de explosiones y las películas-zapping, es un adicto a los remakes y 'reboots'. 'Transformers: La era de la extinción', el cuarto capítulo cinematográfico de las andanzas de los populares robots gigantes salvadores del mundo, se reveló como un nuevo comienzo al cambiar de reparto e intenciones, buscando el no va más en 3D. Mark Wahlberg a la cabeza del casting, más artefactos imposibles que cobraban vida, más mamporros a troche y moche y una sobredosis de escenas de acción que prevalecían sobre todo lo demás.  El todopoderoso Bay también dio un nuevo empujón a las famosas Tortugas Ninja como productor de un 'reboot' que llegó a las salas con el rostro de Megan Fox y efectos a mansalva.

Otra saga que ha vivido un relanzamiento en los cines hace nada ha sido 'Transporter', que también cuenta con una serie programada en televisión. Renovaron el rostro del protagonista: el popular Jason Statham pasó el testigo a Ed Skrein, la cara de Daario Naharis en 'Juego de Tronos'. Ray Stevenson ('Divergente') y Loan Chabanol ('Aprendiz de gigoló') le secundaban en un 'reboot' dirigido por Camille Delamarre, artífice de 'Brick Mansions (La fortaleza)', remake de un remake: 'Distrito 13'. Luc Besson se mantenía en la sombra, figurando en los créditos de producción, cegado en su empeño de competir con el cine comercial made in USA. "'Transporter Legacy' es más que un 'reboot'", comentaban los responsables. "Es una historia totalmente nueva". ¿Seguro?

Invasión imparable

Hay 'reboots' confesos y otros no tanto, o remakes y secuelas que hacen la función de relanzamiento, como el nuevo 'Godzilla' o la genial 'Mad Max: Furia en la carretera', que a pesar de ser una estupenda continuación de la serie de culto es como si partiera de cero: no hace falta ver los anteriores capítulos para dejarse llevar por la historia. En cierto sentido, tanto en 'Jurassic World' como en la última secuela de 'Star Wars' han reseteado la franquicia para regresar a sus orígenes. El séptimo episodio en el tiempo de 'La Guerra de las Galaxias' va directo al corazón del groupie. La película de J.J. Abrams no se anda con chiquitas y apela a la nostalgia por la puerta grande, marcándose un remake que no oculta su condición y atrapa emocionalmente a su target calcando sin sonrojo todo aquello que ya hacía vibrar a millones de personas por todo el planeta: acción, aventura y el culebrón de Skywalker y compañía.

Los ejemplos son incontables. Vivimos una auténtica invasión de 'reboots'. Las redes echan humo con las nuevas Cazafantasmas, que están dando mucho de qué hablar al haberse cambiado el género del reparto principal, y la nueva 'Independence Day' no parece contar con la gracia de su predecesora, ese sentido del humor del cine de acción popularizado en los años 90 que cada vez se echa más de menos. Se mantiene todavía en la cartelera 'Creed. La leyenda de Rocky', dirigida por Ryan Coogler ('Fruitvale station'), donde Stallone vuelve a encarar uno de sus papeles más célebres, el del boxeador Rocky Balboa, cediendo el testigo a Michael B. Jordan, uno de los protagonistas de un 'reboot' nefasto que se estrelló en la taquilla el pasado verano: 'Cuatro fantásticos'.

La televisión acoge un montón de relanzamientos, algunos con una calidad innegable. Está la recomendable serie 'Fargo', se habla de la nueva 'Twin Peaks' y los adictos a 'Expediente X' se han encontrado con otra vida en televisión de las tribulaciones de Mulder y Scully.

Por terminar una lista interminable y elegir un título que sí se tomó muy en serio su nueva andadura, nos quedamos con un 'reboot' que pasó desapercibido en la cartelera, 'Dredd', cinta ya emitida en la ventana electrónica. El Juez Dredd, agente de la ley, juez, jurado y verdugo, implacable y ultraviolento, regresó a la gran pantalla en un 'reboot' que se despegaba de la anterior adaptación del cómic al celuloide, aquella donde Stallone encarnaba al azote de los delincuentes exhibiendo su mentón bajo el icónico casco del personaje futurista creado por el dibujante Carlos Ezquerra y el guionista John Wagner en los años setenta para las páginas de la revista '2000 AD', cabecera británica de referencia bien nutrida con ácidas viñetas de temática fantástica. El filme, protagonizado por Karl Urban ('El Señor de los Anillos'), bajo la dirección de Pete Travis ('En el punto de mira'), contó con la participación de Ezquerra y Wagner en el guión, lo que aportó cierta garantía a la revisitación del carismático antihéroe de papel, el de la mítica frase "Yo soy la ley" -hasta Anthrax le dedicó una canción-, cuyas peripecias van cargadas de ironía y humor negro. La trama, por cierto, tenía claros puntos en común con 'Robocop 2' -no hablemos del terrible 'reboot' de la saga- y, sobre todo, con la excelente 'The Raid: Redemption', una de las mejores cintas de acción de la última década, estrenada en nuestras fronteras directamente en DVD y Blu-ray bajo el fallido título 'Redada asesina'. Por supuesto, está en camino su remake hollywoodense.

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