«La lucha es el camino a la victoria», asegura Otegi en Elgoibar

Arnaldo Otegi ha sido aclamado en Elgoibar, donde le han tributado un recibimiento después de haber salido esta mañana de la cárcel de Logroño, cinco minutos antes de las nueve de la mañana. «Independentzia!» ha sido la primera palabra que ha pronunciado en cuanto se ha acercado al estrado, después de algunos bertsos y un aurresku. El líder de la izquierda abertzale ha mantenido un discurso similar al que ha pronunciado tras salir de la cárcel, aunque ha incluido algunos matices. «Ahora toca ganar. Paz, sí, pero también libertad e igualdad entre trabajadores», ha reivindicado. «Sonreíd porque ganaremos, os diría. Pero es mejor decir que sonriáis porque lucharemos. Porque la lucha es el camino hacia la victoria. Necesitamos la independencia», ha concluido.

El acto, que ha sido seguido por unas 2.000 personas en la plaza principal de la localidad, ha contado con la presencia de la plana mayor de Sortu, con Pernando Barrena, Rufi Etxeberria y Joseba Permach a la cabeza, acompañados, como esta mañana en Logroño, por los dirigentes de la CUP David Fernández y Ana Gabriel. También han acudido el exdiputado general de Gipuzkoa, Martín Garitano, la última candidata a lehendakari de EH Bildu, Laura Mintegi, y referentes históricos de la izquierda abertzale como Juan María Olarra, entre otros.

Otegi ha subido al estrado después de que lo hiciera su familia entre gritos en favor de la independencia y de los presos de ETA. Tras una sesión de bertsos, txalaparta y un arresku, se ha hecho con el estrado y, aunque ha dicho estar un poco «desentrenado», ha ofrecido a los asistentes un mitin en toda regla. El dirigente de Sortu, que ha utilizado en varias ocasiones el lenguaje acuñado por Podemos, su nuevo rival político y electoral, ha asegurado que «ahora que se habla de la nueva política» la izquierda abertzale ofrece a los vascos «un futuro nuevo».

Tras comentar que le han dicho que «Euskal Herria ha cambiado» durante su reclusión, aunque él no está «tan seguro», Otegi ha afirmado que se alegra «sinceramente» de que «haya mucha gente que vivía con escoltas, que vivía acosada, según decían ellos, y que hoy pueda vivir en paz y en libertad». «Pero hoy lo que llevo en el corazón es a esas madres, a esos padres, a esos compañeras y compañeros que llevan 30 años haciendo la bolsa para la visita de las cárceles en el Estado francés y en el Estado español», ha dicho a continuación.

Ha tenido palabras de recuerdo al exsecretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga, preso en El Dueso (Cantabria) por el caso Bateragune, al tiempo que ha asegurado que no se podrá hablar de «situación normalizada en Euskadi» mientras haya 400 presos de ETA en prisión. Tras recordar que la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Saénz de Santamaría, ha dicho de él que debe estar en la cárcel porque es «un terrorista peligroso», el portavoz abertzale ha citado una canción de Los Chikos del Maiz en la que aseguran que «terrorismo es Manuel Fraga Iribarne asesinando a trabajadores en Vitoria».

Otegi ha rememorado el último homenaje que recibió en esta misma plaza, hace 7 años, cuando aseguró que la izquierda abertzale «traería la paz a este pueblo». «Hemos cumplido», ha proclamado, tras lo que ha añadido que «todavía queda mucho camino por recorrer y no será fácil». «Ahora toca ganar, generar las condiciones que hagan posible la convivencia y la paz sí, pero la libertad y la igualdad también», ha argumentado Otegi.

En este punto, el secretario general de Sortu ha abogado por «hacer autocrítica», pero no porque se lo pidan «las élites de otros partidos, que están en su derecho», ni porque lo exija «la casta de Madrid», sino porque la izquierda abertzale «se debe a este pueblo». Sobre su posible candidatura a lehendakari, Otegi no ha aclarado ninguna incógnita y ha dicho que en la izquierda abertzale ha habido muchos posibles lehendakaris, tras lo que ha citado a históricos fallecidos como Jon Idigoras, Jokin Gorostidi, Periko Solabarria y Txomin Ziluaga.

De esta manera ha festejado Otegi su puesta en libertad tras 6 años y medio de condena por el intento de refundar Batasuna a través de la plataforma Bateragune. A la salida del centro penitenciario riojano le aguardaban un par de cientos de simpatizantes y dirigentes de EH Bildu, que le han recibido entre consignas a favor de la independencia y de los presos de ETA. Otegi, que junto a su petate portaba una bandera de Sudáfrica y símbolos en contra de la dispersión, se ha fundido en un abrazo con su padre, su mujer y sus dos hijos nada más pisar el exterior de la prisión.

A unos metros, en un pequeño escenario montado por la formación independentista, el líder de la izquierda abertzale ha pronunciado sus primeras palabras tras recobrar la libertad. En una intervención de apenas minuto y medio en euskera y castellano, ha asegurado que se trata de un «preso político», «solo hay que ver el número de cámaras que hay hoy aquí, y que no vienen cuando sale un preso social, un inmigrante al que van a repatriar o un trabajador al que expulsan de su casa», ha advertido.

«Nos encarcelaron siendo euskaldunes y salimos siendo euskaldunes. Nos encarcelaron siendo independentistas y salimos siéndolo aún más», ha señalado desde el pequeño escenario colocado en una campa cercana a la prisión.

El dirigente abertzale, que ha dicho que «más adelante» ya tendrá ocasión de pronunciar un discurso más largo -el sábado se espera una declaración de mayor calado en el velódromo de Anoeta, en San Sebastián-, ha aludido de forma sucinta al proceso emprendido por la izquierda abertzale en 2009 y 2010 por el que rompió amarras con la estrategia terrorista y abrazó los métodos exclusivamente pacíficos y democráticos. Ha asegurado que a él y al resto de dirigentes detenidos por el 'caso Bateragune' les encarcelaron por «hacer una apuesta por la paz». Otegi ha felicitado a sus compañeros de partido por haber seguido adelante con aquel proceso «a pesar de los obstáculos». Y se ha mostrado dispuesto a ponerse al frente del movimiento independentista. «La paz es el camino -ha dicho- y hay que llevar esa apuesta hasta el final». Todo ello cuando en las últimas semanas se habla, como ha hecho el Foro Social en Gernika recientemente, de la necesidad de que ETA avance en su desarme y enfile el camino hacia su disolucion.

Otegi también ha aludido a su candidatura a la Lehendakaritza, aunque lo ha hecho con cierta ironía. Aunque EH Bildu espera proclamarle candidato el próximo mes -el político de Elgoibar se va a ir cuatro semanas de vacaciones con su familia-, él no ha querido despejar esa incógnita y se ha limitado a decir que, aunque sabe que hay «mucho morbo» con este asunto «el mejor lehendakari, el mejor alcalde, el pueblo».

Durante el pasillo que han realizado quienes han acudido a su despedida, también ha hablado sobre las declaraciones suyas que ha publicado el diario 'The New York Times' en las que expresaba que quería presentarse como candidato a la Lehendakaritza. «Me he enterado de que he dicho eso en 'The New York Times'. Me alegro de saberlo», ha comentado con ironía a su hija, que le ha respondido entre risas con un «y yo también».

Tras su breve alocución, Otegi se ha fundido en abrazos con buena parte de los dirigentes presentes frente al penal de Logroño. Estaban todos los líderes de la coalición EH Bildu. Hasier Arraiz (Sortu), Pello Urizar y Unai Ziarreta (EA), Rebeka Ubera y Jon Iñarritu (Aralar), y Oskar Matute (Alternatiba). Además, ha acudido la plana mayor de la izquierda abertzale, con Rufi Etxeberria, Iñigo Iruin, Pernando Barrena... Tampoco han faltado representantes de formaciones catalanas como la CUP -David Fernández y Anna Gabriel- o el músico y parlamentario catalán de Junts Pel Si Lluis Llach.

Fracasos en las urnas

Otegi, sale de prisión en un momento convulso para la izquierda abertzale, zarandeada por sus sucesivos fracasos en las urnas, en los que se ha visto superada en Euskadi por Podemos. En este sentido, la salida de prisión de Arnaldo Otegi es vista dentro de la coalición y de la propia Sortu como un «revulsivo». Ese golpe de efecto necesario para invertir una tendencia. Para remontar el vuelo tras los dos «traspiés» electorales de 2015 que han dejado a EH Bildu en una posición inesperada: según el último Sociómetro del Gobierno vasco, la coalición abertzale parte en tercera posición en la carrera hacia Ajuria Enea, por detrás de los jeltzales y de Podemos, a pesar de que la formación morada carece desde hace tres meses de una dirección en Euskadi. Pero además de los problemas electorales, en la izquierda abertzale ha aflorado por primera vez una disidencia crítica que rechaza las posturas que han retirado de la agenda la exigencia de la amnistía para los presos de ETA. Estos grupos, cada día más desafiantes, están cuestionando la línea oficial de Sortu y, en ocasiones, intentando arrebatar el liderazgo sobre una cuestión tan espinosa como es la de los presos de la banda.

Otegi llega para intentar poner algo de calma en ese mar agitado. En la coalición se le ve como «un líder carismático» que «trasciende más allá de Sortu y EH Bildu» y que es bien conocido por toda la sociedad vasca. No obstante, en algunos sectores de la entente abertzale se tienen dudas sobre el efecto que puede tener el político de Elgoibar en los votantes. Entiende este grupo que su imagen quedará siempre ligada al pasado, a la época en la que ETA atentaba, y que le obligará de forma constante a dar explicaciones. Un flanco en el que el resto de los partidos golpearán una y otra vez.

Homenaje en Anoeta

Porque Otegi será designado candidato a la Lehendakaritza en las próximas semanas. Todo apuntaba que la designación, tras someterla a una votación de las bases por medio de asambleas locales, se realizaría en el mes de marzo, pero no se descarta ya que se vaya a posponer al mes siguiente. Aunque el exportavoz de Batasuna tendrá una agenda intensa homenaje en Elgoibar hoy mismo y acto en el velódromo de Anoeta el sábado, los responsables de la izquierda abertzale tienen previsto que desaparezca varias semanas del foco informativo para que pueda pasar tiempo con su mujer y sus dos hijos. Su designación como candidato le hará acaparar de nuevo titulares. Porque la izquierda abertzale forzará una vez más a los jueces a pronunciarse durante la preampaña sobre la inhabilitación para ejercer un cargo público que pesa sobre el exportavoz de Batasuna. Los abogados de Sortu creen que no hay motivo para que no pueda encabezar la lista porque en su sentencia se cometió el error de no especificar para qué puestos concretos se le negaba el acceso.

Tras ese periodo de descanso, la izquierda abertzale quiere que Otegi proyecte una imagen más cercana a EH Bildu que a la propia Sortu, de la que es secretario general fue elegido para ese cargo por la militancia a pesar de que estaba encarcelado y de que no había sido propuesto para ello. Se desconoce en este sentido, cuál será su papel en el congreso que Sortu celebrará en junio y si se le reservará algún cargo significativo.