Las trincheras de Lemoa atraen a arqueólogos profesionales

Por sexto año consecutivo, Lemoa acogerá este verano un campo de trabajo. Un proyecto de memoria histórica que «trata la recuperación de la zona de trincheras, ubicadas en la cima del monte donde se libró una batalla de la Guerra Civil». Para llevarlo a cabo, desde la Dirección de Juventud del Gobierno vasco y el Ayuntamiento se impulsa este programa, con dos turnos (del 16 al 30 de julio y del 30 de julio al 13 de agosto). «Todavía no están definidas las inscripciones, pero esperamos que venga, como siempre, gente de todo el mundo, de toda Europa, Asia y América Latina principalmente», detalla Mikel García, técnico del Consistorio.

Serán veinte personas por quincena, supervisadas por los arqueólogos Alba Peña y Julian Blanco. La catalana y el francés son los responsables de un proyecto dirigido a jóvenes de entre 18 y 26 años que constituye «un medio para fomentar unos determinados valores: convivencia, tolerancia, solidaridad, participación, aprendizaje intercultural...». Dividirán sus jornadas en dos partes, con el trabajo en los campos en horario matutino y tiempo para el ocio por la tarde. «El equipo de animación propondrá una serie de actividades que posibiliten la relación entre personas participantes que sirva de acercamiento a la cultura y costumbres del País Vasco», explica la organización. «En los campos se plantean otro tipo de acciones, como visitas turísticas a Bilbao o Donostia, talleres relacionados con la cultura...», detallan desde el Ayuntamiento.

Sin tiempo para actividades complementarias estará el equipo de arqueólogos que trabajará en Lemoa del 13 al 22 de agosto en lo que supone la gran novedad de esta edición. «Una vez finalizado el grupo de la segunda quincena comenzará lo que hemos organizado con Aranzadi, un campo de trabajo de arqueólogos», anuncia García. «Hay mucho trabajo por hacer aún, y hay sitios donde se requiere mano de obra profesional, por lo que, mediante este campo, lo que vamos a intentar es que las zonas más técnicas se puedan llevar a cabo con estos profesionales», explica. Se espera la participación de una quincena de personas procedentes de distintos puntos de España.

Este municipio arratiano fue un importante escenario en la Guerra Civil, en la que, el 16 de junio de 1937, fue ocupado por el bando nacional tras una enconada batalla en la zona de Lemoatx, donde murieron cientos de soldados. Precisamente los restos que dejó ese enfrentamiento son el origen de estos campos de trabajo, que continuarán en San Antolín, en las labores realizadas el pasado año, «tirando hacia la zona de Arratia y hacia Amorebieta», puntualiza García.