Una empresa de Derio traslada a Rumanía parte de la producción y despedirá a 40 trabajadores

Otra compañía histórica vasca entra en crisis. Los empleados de la planta de material eléctrico de Eaton en Derio recibieron el pasado martes una comunicación de la empresa trasladándoles su intención de iniciar «un procedimiento de despido colectivo» como consecuencia de la deslocalización a Rumanía de parte de su producción, que afectará a un máximo de «40 trabajadores internos». Según informó ayer ELA, la firma alega causas «productivas y organizativas» para aplicar este expediente de rescisión de contratos, que también repercutirá en numerosos empleos indirectos.

Con casi 40 años de historia productiva -la empresa comenzó la fabricación de automáticos y diferenciales eléctricos en 1978-, esta industria vizcaína ha pasado por diversas manos. Nacida de una firma importadora de los materiales que luego fabricaría bajo el nombre de Medex, fue comprada por F&G en 1983, más tarde por Moeller en 1998 y finalmente por Eaton en 2008.

La fábrica cuyo futuro está en el alero, según fuentes del comité de empresa, forma parte de Eaton Industries (Spain), S. L., que está integrada en Eaton Power Quality, S.L.U., perteneciente a la división de Power Distribution Components del grupo multinacional estadounidense Eaton, presente en más de 140 países y que cuenta con más de 70.000 empleados.

A juicio de ELA, semejante procedimiento supone un «claro ejemplo más de que a las empresas multinacionales solo les importa la cuenta de resultados y generar beneficios, no dudando en destruir puestos de trabajo a cientos o miles para conseguir incrementar sus resultados», aunque ello tenga como «consecuencia dejar Euskal Herria como un solar industrial».

La propia empresa indica que este proceso de ajuste tiene como objetivo «eliminar ineficiencias de productividad» y mejorar la rentabilidad y la utilización de los recursos».

Concentrar la producción

La multinacional informó a EL CORREO de que el traslado de producción de la planta de Derio a Rumanía forma parte de una serie de decisiones para concentrar la fabricación de algunas líneas de producto en determinadas factorías. En el caso de la reestructuración que afecta a la fábrica vizcaína, parte de la producción será trasladada a la que tiene en la localidad rumana de Sarbi. Se trata, precisó, de la «gama FAZ L9 de interruptores magnetotérmicos y del sistema magnético de la gama FS».

La fabricación de las gamas FAZ NA y FS, agregó, no resultará afectada por esta propuesta y se mantendrá en la fábrica vasca.

La compañía indicó en un comunicado remitido a este diario que el ajuste que implicará esta deslocalización de la producción supondrá «la reducción de hasta 40 empleos internos y la finalización de los trabajos externalizados» en la fábrica de Derio. Y anunció que este recorte se realizará «cumpliendo con la legislación laboral española y aplicando las prácticas de Eaton». «Los empleados afectados serían indemnizados» si la operación sigue adelante, prometió.

Al tratarse de un ajuste por causas productivas y organizativas, la indemnización mínima a los trabajadores será de 20 días por año trabajado, con un máximo de una anualidad, según la legislación española. Falta por ver qué reflejo tendrán en las compensaciones las citadas «prácticas de Eaton».

La multinacional «lamenta» el impacto del ajuste en sus empleados, familias y proveedores, y asegura que dará «los pasos necesarios para asegurar que cualquier acción tomada será respetuosa con las personas afectadas». También apuntó que su intención es «ayudar a los empleados afectados en su camino a un nuevo futuro profesional».

La plantilla podrá empezar a conocer las condiciones de los despidos a partir del próximo martes, cuando el comité de empresa se reúna con la dirección dentro del periodo de consultas con los trabajadores que estas operaciones requieren.