Durango recibe a 41.164 aficionados a la artesanía
La villa celebra el récord de público en los cinco días de la XXVII edición de la Euskal Denda
Poner en valor los productos hechos a mano y la artesanía. Con este objetivo, 41.164 asistentes llegados de muchos rincones del País Vasco han disfrutado durante cinco días de la XXVII edición de la Euskal Denda, visitando los stands de 54 expositores en la Plaza del Mercado de Durango. La cita ha superado todos sus registros históricos de visitantes. Nunca antes había logrado alcanzar los 35.000 visitantes y esta edición los ha rebasado con creces. Un éxito de público, que se ha extrapolado en las compras, pues quien más y quien menos algo se ha llevado para casa.
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«Muy orgullosa y satisfecha de que la sociedad avale esta cita en la que los artesanos demuestran que son un valor emergente a nivel cultural y económico», comentó Verónica García, secretaria de la asociación Arbaso, Asociación para el Fomento de la Artesanía Tradicional de Euskal Herria, organizadora del evento donde a pocos metros del citado lugar se celebraba la Azoka.
«Este año la afluencia ha sido espectacular. Para nosotras/os alcanzar esta cifra ha sido un sueño hecho realidad. Quienes se han pasado por la plaza del mercado de Durango han demostrado que la artesanía es un sector cultural y económico a tener en cuenta», prosigue.
En la jornada inaugural, pasaron 10.430 personas, el jueves laborable 7.702, el viernes festivo 10.687, el sábado 7.627 y el domingo se acercaron 4.718 personas. Los días más potentes, con un mayor número de visitantes, coincidieron con los festivos. Con estos datos, la Euskal Denda deja en evidencia que es una cita inexcusable para muchos de los que se acercan a la villa en estas fechas. Durante los cinco días que se ha prolongado este evento las visitas han sido constantes.
«Hemos cumplido con el aforo de 506 personas en el recinto, en todo momento», apuntó Arbaso, que, al mismo tiempo aseguró que «ha sido un goteo constante, pero creemos que el público ha disfrutado de este encuentro con los artesanos. Estamos satisfechas porque vemos que hay relevo tanto en los puestos, pues este año hay muchas artesanas nuevas muy jóvenes, como también entre el público. Se ha convertido en una peregrinación y tanto mayores como jóvenes se acercan. Tenemos oferta para todo tipo de gusto y edad», explica.
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Por supuesto, todo ello se ha extrapolado a las ventas. «Todos los artesanos han vendido bien. No ha habido nadie que haya destacado sobre otro. De hecho, hay público para cada uno de los asistentes a la Euskal denda y es estupendo ver que todos están satisfechos. Algo que da al sector nuevas alas y bríos para afrontar el futuro», esgrimían los promotores «somos un referente».
La Euskal Denda ha acogido a un total de 54 productores procedentes de Álava, Bizkaia, Gipuzkoa, Lapurdi y Nafarroa. Cuatro profesionales más que en ediciones anteriores, con 15 firmas novedosas, lo que ha supuesto una renovación del 30% de la feria.
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En cuanto a los sectores el textil ha tenido presencia mayoritaria con once artesanos. No han faltado segmentos habituales como el agroalimentario, la joyería, el cuero, la bisutería, la cosmética, la madera, la cerámica, la muñequería, los juguetes, el deporte vasco, el macramé, la serigrafía, el calzado o la flor seca. Arbaso tiene ya la mirada puesta en la próxima edición. Durante este tiempo seguirá con la búsqueda de nuevos caminos para fomentar la artesanía tradicional, pero con la innovación como bandera.
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