Los médicos desaconsejan la toma de analgésicos al acostarse para evitar la resaca del día después

La medicina popular, que poco tiene de medicina con ese adjetivo, atribuye propiedades antirresaca a determinadas acciones antes de acostarse. Una de las ideas más extendidas es que si uno se toma un analgésico antes de dormir se despertará con muchísimo menos malestar. Es tan falso como creer que dormir sin almohada hace algo, salvo que a uno le genere cierto efecto placebo. No hay ningún estudio científico que demuestre que estas medidas ayudan a combatir los efectos que produce en el organismo la metabolización del exceso de alcohol en la sangre.

«La lógica dice que lo más efectivo, aparte de no beber, es refrescar el organismo con líquidos para ayudarle a absorber cuanto antes el excedente alcohólico», argumenta la jefa de Endocrinología del hospital de Cruces, Sonia Gaztambide. El mejor refresco existente es el agua, pero un buen caldo de verduras contribuirá a la mejor eliminación de los restos tóxicos del organismo.

Un estudio publicado en British Medical Journal, la publicación médica más prestigiosa del mundo, sostiene que el alto contenido en vitamina C y fructosa del zumo de naranja ayuda al hígado a metabolizar el alcohol y duplica la velocidad en que el organismo se sanea. La condición que debe cumplirse es que ha de ser fruta natural recién exprimida, no vale zumo de bote, pero también hay que recordar que el exceso de azúcar tampoco es bueno.

«Es importante que cada uno se conozca y que sepa hasta dónde puede llegar, porque cada organismo es diferente», recuerda el médico de Urgencias. «El consumo de alcohol es malo por definición, pero siendo realistas, sabemos que en estas fechas, quién más quien menos se va a tomar una copa. Hay quien metaboliza en unas horas y quien necesita días; y eso cada uno lo tiene que saber y tenerlo en cuenta», argumenta el especialista. Cuestión aparte, además de lógica, es que a cada década que pasa, el cuerpo tiene que hacer un esfuerzo mayor para absorber la ingesta de alcohol. El resacón, con el mismo consumo no es igual a los 20 años que a partir de los 50.

El malestar general de la resaca, un fenómeno que la medicina conoce por el nombre técnico de veisalgia («trastorno corporal debido a la ingesta excesiva de bebidas espirituosas»), una vez desatado, sí puede combatirse con analgésicos. Lógicamente, sin abusar de ellos, aunque la mejor terapia, insisten los especialistas, pasa por rehidratar el organismo. La recomendación sería utilizar aspirina o ibuprofeno. El paracetamol debe evitarse porque su acción, en combinación con la del alcohol, puede resultar muy dañina para el hígado, órgano encargado de metabolizar los fármacos.

También acorta los síntomas la toma de huevo, que contiene cisteína, un aminoácido con alta capacidad antioxidante, y la vitamina B6, presente en el arroz, la avena, el trigo y los frutos rojos. «Está bien celebrar las fiestas, pero mejor con control», recalca la endocrinóloga de Cruces Sonia Gaztambide.