Vitoria-Gasteiz, capital del sabor: recorrido por 10 de los restaurantes elegidos por la Guía Repsol

Que en Álava en general y en Vitoria-Gasteiz en particular se come bien es algo ya sabido. Pero si a ello se le añade que en el territorio hay muchos restaurantes recomendados por los ‘Soles’ de la Guía Repsol, el asunto del buen comer se pone aún más interesante. ¿Quieres conocer quiénes son algunos de ellos?

Ikea

En su nueva etapa, el restaurante Ikea ha logrado lo más difícil: que un espacio de culto recupere su esencia sin renunciar al cambio. Bajo la dirección de Óscar Abajo el restaurante se presenta como una de las propuestas con mayor carácter de la ciudad y lo que es mejor, para cualquier día del año, o como a ellos mismos les gusta decir: «Un Ikea para todo y para todos».

Espacio, menús y carta orientados al comensal, quien puede elegir entre raciones y medias raciones en una experiencia diseñada para el disfrute compartido. Una propuesta que cuenta con el reciente reconocimiento de la Guía Repsol.

Desde la nécora en su hábitat (el plato estrella solo disponible en fin de semana) o la burrata de Idiazabal con pesto y tomates pasificados, pasando por la reinterpretación del histórico carpaccio de langostino del establecimiento, o la yema de baserri, panceta y trufa. Verdaderas delicias hechas en casa y algunos de los platos que también se pueden disfrutar en el formato menú degustación: 9 pases para el disfrute prediseñado por el equipo en esta experiencia guiada para quienes no les gusta elegir.

Un Ikea para todo y todos

Zaldiaran

Gran referencia alavesa desde hace cuatro décadas. Zaldiaran es la joya de la corona de la gastronomía vitoriana, donde destaca su trato exclusivo, elegante y servicial de todo un equipo comandado por Gonzalo Antón. En los fogones se encuentra su relevo: Juan Antón, junto con Victor Vindel y se completa en parrilla con Jon González de Zárate. Juan Antón se ha formado con los hermanos Roca. Trabajo y servicio son sus claves. Él recoge todos los secretos que han desvelado los grandes chefs que han pasado por los certámenes y congresos que lleva el Zaldiaran a sus espaldas. Este año cumple sus 40 años, y con Juan Antón al frente sigue apostando por la parrilla pero sin olvidar su experiencia de cocina tradicional.

Alcachofas en tempura, crujiente de hongos, almejas en sartén, Kokotxas al pil pil, callos y patitas de ternera acompañadas de láminas de trufa con espuma de patata son las delicias estrella que se podrán disfrutar en el restaurante.

Zabala

Situado en la calle Mateo Moraza, en pleno corazón de Vitoria, el restaurante Zabala esconde entre sus paredes rincones más de 200 años de historia. Es en 1962 cuando se inaugura el restaurante, una casa de comidas especializada en cazuelitas y platos ligados a la matanza del cerdo y con un postre estrella, el ‘Gosua’.

Hoy en día, y bajo la filosofía ‘Tradición y Vanguardia’, elabora una combinación entre cocina tradicional y de mercado, utilizando como materia prima un producto local de temporada, cercano y ecológico, con el aporte de las últimas tendencias. Entre esta unión de tradición y vanguardia destaca su parrilla de carbón vegetal que elabora carnes y pescados en el punto que elija el cliente.

La despensa ‘vintage’ ofrece platos ricos como las alcachofas en tempura, txipirones a la plancha o su sabrosa tarta de queso.

Entre su variedad de menús, podemos elegir el Menú Zabala por ejemplo, que se compone de cuatro entrantes a elegir como puerros confitados, txipirones a la plancha y de un segundo también a elegir también entre cinco platos: solomillo, carrilleras o taco de bacalao. Hay otros tipos como el Olaguibel, Vegano o el Despensa.

La cocina , el entorno, la atención personalizada hace que el Zabala renueve durante este año 2022 su plaza en la prestigiosa lista Bib Gourmand que se incluye en la Guía Michelín 2022 y en la otra prestigiosa guía de restaurantes recomendados Guía Repsol 2024. Esta posición en solamente para una selección de restaurantes recomendados en su zona, que presentan una excelente relación calidad-precio en un entorno único.

Sagartoki

Sagartoki es un restaurante imprescindible de Vitoria-Gasteiz. Siempre en constante evolución, continúa sorprendiendo a sus clientes con un producto de máxima calidad, que es el ingrediente esencial de su cocina, aderezado con una meticulosa elaboración.

Todo ello para ofrecer una amplia oferta gastronómica de creativos y deliciosos pintxos, como los míticos rulos mediterráneos, su icónico y famosísimo pintxo de huevo frito, o sus delicias de salmón y anchoa recientemente incorporadas. Porque los clásicos de la mesa de Sagartoki como el chuletón, la carne y los pescados a la brasa, conviven con nuevos platos como el steak tartar, el tataki de atún y la hamburguesa de vaca gallega.

Además, Senén González, siempre en constante búsqueda de la excelencia en su cocina, vuelve a revisar su receta de tortilla de patata, ya campeona de España, para conseguir un nuevo premio y deleitar a todo aquel que se acerque a su restaurante.

Una espectacular combinación de sabores a la que se une una amplísima bodega con casi mil referencias. Vinos de todos los lugares del mundo, la mejor cerveza y los cócteles de autor de Raúl F. M. completan este maravilloso universo Sagartoki en el que todos pueden disfrutar en un rincón inigualable en pleno corazón de Vitoria-Gasteiz.

Andere

En los fogones del restaurante Andere conviven la experiencia de casi cinco décadas con el buen saber hacer de sus responsables Silvia y Alavaro. Los ingredientes, cuidadosamente seleccionados entre productos locales de temporada, han convertido el proyecto de su padre Fabián Tobalina en un referente de la gastronomía vitoriana. Su oferta de menús y sus servicios para celebraciones es la opción que escogen miles de comensales cada año. Un éxito ganado a pulso con el secreto que ha caracterizado al Andere desde su inicio. «Siempre tuve claro que el éxito está en el buen trato al cliente, pero sobre todo en la calidad del producto», destaca Fabian.

Su menú degustación presenta platos como el salmorejo de remolacha, la ensalada de atún rojo marinado, el huevo ecológico de Zalduendo, la merluza a baja temperatura o la paletilla de cordero lechal asada.

Como novedad para esta primavera destaca el menú ejecutivo, que puede disfrutar en pleno centro de un comedor acogedor con un colorido jardín.

Mano lenta

Luis Hernani, cocinero y gerente de Mano Lenta cada año suma premios, reconocimientos y galardones a sus vitrinas. Recientemente ha sido elegido por el público como el ganador de la segunda edición de los Premios Araba, mientras su restaurante se consolida como referente gastronómico de la capital alavesa gracias a su colaboración con otros establecimientos en la preparación de la cena del Basque Culinary Center.

Estos reconocimientos se unen al recibido en la tercera edición del Campeonato de Pintxos tradicionales de Euskadi y Navarra, donde se hizo con la txapela de ganador con una elaboración de pimientos y bacalao.

Pero sus reconocimiento no sólo se limitan a su cocina, sino también a su servicio. Su servicio de sala le han hecho merecedor del primer Campeonato de Sala de Euskadi. Toda la experiencia de sus galardones se transmite en cada plato que sale de su cocina, un tributo que Hernani hace a sus raíces, a las recetas tradicionales inspiradas en los guisos de antaño, pero reelaboradas con toques vanguardistas. Y es que Luis se encuentra entre las nuevas generaciones que investigan la gastronomía como filosofía de vida.

Para este 2025, Mano Lenta incorpora nuevas experiencias además de un menú estaciones que utiliza lo mejor de cada temporada.

Con referencia a los grupos incorpora de 3 tipos:

Menú Eguzki: Ensaladilla rusa con gambas al ajillo con algas y brotes. Luego compartimos merluza con salsa de bogavante, tarrina de ibérico, y de postre torrija caramelizada. 46 €

Menú Euria: Entrantes Tigre de Bogavante, picaña de vaca.,etc para compartir lubina a la parrilla con patatas panadera, entrecot de vaca a la parrilla y de postre tarta de queso al horno. 56 €

Menú Zerma: Se comienza con croquetas caseras de la casa, entrantes tarrina de foie, carpaccio de bacalao y sopa de marisco. Rodaballo salvaje a la parilla con Pil Pil. Después se comparte una txuleta de vaca madura con su guarnición. De postre Goxua ‘mano lenta’ con almendra tostada.

Todos los menús van acompañados de una amplia bodegas con más de 200 referencias

BALLARIN

El chef Eneko Ochoa de Eribe ha consolidado Ballarin como una de las paradas gastronómicas imprescindibles en Vitoria-Gasteiz, gracias a una cocina de calidad que fusiona tradición e innovación para ofrecer una auténtica experiencia culinaria.

Cada plato en Ballarin es el resultado de un trabajo minucioso con el producto, donde el mimo en la elaboración se traduce en sabores intensos y equilibrados. Su propuesta combina recetas clásicas con creaciones más contemporáneas, siempre acompañadas de una cuidada selección de vinos de su bodega.

Novedades

Este 2025 llega con cambios en Ballarin, que apuesta por una cocina ininterrumpida los fines de semana, aprovechando el auge del tardeo. Para ello, su carta de picoteo se amplía con incorporaciones como el carpaccio de chuleta con miel, las rabas de chipirón, la ensaladilla con cigalas y vieiras, el pulpo a la parrilla o el tartar de salmón con guacamole.

Y, por supuesto, el toque dulce no podía faltar: torrija caramelizada y brownie con esféricos de frambuesa destacan en la sección de postres, mientras que su bodega suma nuevos vinos dulces como el Oloroso, además de referencias clásicas como Rioja Crianza y Verdejo.

Con esta evolución, Ballarin se adapta a los nuevos tiempos sin perder su esencia, ofreciendo una carta pensada para disfrutar de un picoteo exquisito en cualquier momento del día.

La Escotilla

Dice el chef Josean Merino que siempre le han gustado los retos y en 2016 afrontó uno mayúsculo, traer el mar a Vitoria. Y lo consiguió, porque desde la apertura de La Escotilla nuestra ciudad tiene un trocito de playa en plena calle San Prudencio.

La Escotilla es el lugar ideal para ‘vermutear’, ‘coctelear’ y picotear. Ya sea un tapeo informal o una celebración especial, esta taberna marinera y marisquería ofrece al comensal una desbordante barra de pintxos y raciones, unos arroces que se llevan la palma y unas cazuelitas y platillos en los que no faltan las gambas y navajas a la plancha, los mejillones bravos y otros frutos del mar regados por un fresco y afrutado txakolí. Además, los fines de semana se refuerza el ambiente de la hora del vermú con una cuidada selección de aperitivos en formato pintxo y raciones, realzando aún más la experiencia del vermuteo y el picoteo.

La Escotilla, además, ofrece a sus clientes un espacio acogedor y cómodo. Disponen de una propuesta gastronómica creativa que incluye nuevas materias primas y una selección de vinos. En cuanto a los menús, destaca el del arrocero con su entrante a elegir, ensalada de tomate con bonito y piparras, ensaladilla rusa con bonito, mejillones de roca del Cantábrico, txitxarritos fritos o sopa de pescado del Cantábrico; y un segundo que se compone de un arroz, negro (sin duda los preferidos por los clientes), de campo, cremoso, caldoso de bogavante o de marisco para dos.

Una mención especial para el menú degustación de mariscos, con entrantes como txupito de pescado, ostras y croquetas de mejillón tigre (definitivamente mejor que las de tu madre), bocados al vapor como los mejillones de roca, almejas y berberechos, y seguidos de platos a la plancha como zamburiñas, gambas rojas de Huelva, navajas, cigalas y bogavante. Para culminar, el postre por excelencia, creme brulee como pocas en el mundo, sorbete o txupitonic.

No puede faltar el menú de la casa, el menú La Escotilla. Un plato para compartir y un segundo a elegir entre lubina a la donostiarra, abanico Ibérico, arroz negro con calamares y tomatitos o sepia guisada con alioli. De postre, el reconocido de la casa, creme brulee.

En la cocina del chef ya se preparan las novedades: pastrami de cerdo con aliño de mostaza y encurtidos, una nueva receta de arroz campero con ibérico y trigueros y un rape rebozado con alioli. Y, pensando en la primavera, La Escotilla reforzará su plan de terraceo con propuestas pensadas para todos, ofreciendo una experiencia aún más completa al aire libre.

LA BODEGUILLA

La historia de La Bodeguilla es la de una pasión familiar que ha pasado de generación en generación. Desde que en 1959 los abuelos de Aitor y Pepe Ocio abrieran por primera vez sus puertas en el número 60 de la calle Olaguibel, el restaurante se ha convertido en todo un referente gastronómico en Vitoria-Gasteiz. Aquellas primeras cazuelitas de asadurilla, callos y bacalao, elaboradas con mimo por la abuela, fueron el comienzo de un legado que hoy sigue más vivo que nunca.

Aitor María Querejazu, tercera generación de la familia Ocio, ha crecido entre los fogones de La Bodeguilla, aprendiendo desde niño los secretos de la cocina tradicional. Su formación en el Basque Culinary Center le ha permitido sumar a esta herencia culinaria un toque vanguardista, sin perder la esencia de la cocina de siempre. Así, en su carta siguen triunfando las cazuelitas de asadurilla de cordero, caracoles, bacalao o revuelto de perretxikos, junto con sus especialidades en carnes y pescados. Pero si hay un plato estrella que todo comensal recomienda, ese es, sin duda, el besugo.

Una carta que rinde homenaje al producto local

La propuesta de La Bodeguilla de Lanciego gira en torno a los sabores de toda la vida, con el mejor producto de temporada. Su carta está pensada para disfrutar en compañía, con entrantes perfectos para compartir: ensaladas, espárragos, puerros a la vinagreta, boquerones caseros, bonito con guindilla, ventresca con cebolleta y morcilla de Briviesca a la plancha, entre otras delicias.

Las cazuelitas siguen siendo el alma de la casa, con opciones como la asadurilla de cordero, anchoas a la cazuela, bacalao con tomate o pimientos del piquillo asados. Y, por supuesto, su selección de mariscos y pescados es un espectáculo: nécoras, centollos, bueyes, percebes, bogavantes, almejas, chipirones y las estrellas de la casa, el besugo y el rodaballo.

Este año, La Bodeguilla de Lanciego celebra su 65º aniversario con el reconocimiento de la Guía Repsol, donde cuenta con la recomendación de los Soles Repsol desde 2023. La gerencia, a cargo de María Victoria Martínez de la Puente, José María Ocio y Aitor, sigue apostando por una cocina que respeta la tradición, pero con la creatividad y el toque innovador de las nuevas generaciones.

Sukalki

Crear nuevas recetas con productos de cercanía no es solo una filosofía para el chef Luis Ángel Plágaro, sino su auténtica pasión. En Sukalki, restaurante colaborador oficial de Slow Food, esta búsqueda constante de innovación se traduce en una carta que cada año sorprende con novedades, siempre con ingredientes de kilómetro cero. Gracias a la estrecha relación de Luis y Leticia Plágaro con los productores locales, cada producto que entra en su cocina llega directamente de las huertas y granjas de la zona.

El resultado es una selección de platos que ya se han convertido en clásicos por su sabor y originalidad. Entre las opciones más demandadas están los espárragos rebozados, el sukalki de ragú y el estofado de ternera ecológica de Maturana con quesadillas de Idiazabal. También destacan las alcachofas de Tudela con verduritas de temporada salteadas, el jamón de Euskaltxerri con pan de cristal y las irresistibles brochetas de potro.

Pero si algo define a Sukalki es la creatividad sin límites. Prueba de ello son propuestas como la picanha de wagyu con miel del Gorbea, el ceviche de lubina salvaje o el tataki de atún rojo salvaje de almadraba. Y para los amantes de la carne, la joya de la casa: la t-bone top, un corte exclusivo de lomo bajo y solomillo con 40 días de maduración, que garantiza una jugosidad y ternura excepcionales con un sabor inigualable.

En Sukalki, cada plato es un homenaje al producto local, donde la tradición y la innovación van siempre de la mano.