La cita 'motera' organizada por Gram 04 consigue reunir a más de 150 participantes

La sede del grupo Gram 04 es un buen lugar de encuentro pero este año los organizadores de la quedada han preferido que el mejor punto de encuentro podría ser la zona peatonal de la plaza de abastos, «hemos querido recuperar así la tradición de ver cómo la gente se reunía siempre en estos lugares y, además, acercar un poco más las actividades a la zona céntrica para que todos los mirandeses pudieran , de alguna manera, disfrutar con el encanto especial que tiene el mundo de las motos», apuntaba el presidente del grupo, Luis Ángel Santamaría 'Luigi', muy satisfecho por la respuesta a la llamada.

No en vano al final acabaron congregándose desde las diez de la mañana prácticamente 150 motos. Saben en el Gram 04 que este día tiene habitualmente tirón, pero no podía obviar la situación, así que «teniendo en cuenta que estamos en cifras similares a las de otros años, estamos muy contentos».

La zona escogida empezó a animarse desde muy pronto y poco a poco fueron concentrándose las motos de distintas marcas y cilindradas (no había cortapisa alguna en este sentido) y, a medida que los mirandeses fueron percibiendo el sonido de los motores, se acercaron hasta el lugar de encuentro para poder así contemplar lo espectacular de algunas máquinas. Eran mayores y pequeños los que echaban un vistazo, al igual que había también participantes bastante jóvenes, como es el caso de Daniel Salmerón que, a sus 13 años repetía experiencia y estaba dispuesto a disfrutar acompañando a su padre, «a mi me toca ir de paquete»; algo que confía en que cambie en cuanto alcance la edad de conducir, «pediré una moto y supongo que no habrá problemas para que me la compren».

Para eso aún tendrá que esperar, pero la cita organizada por el Gram 04 le permitió pasar una buena jornada porque a él le gusta «todo lo que rodea a las motos. Es muy interesante y yo le diría a la gente que se animara a venir a estas cosas, se disfruta mucha».

Así lo creen también los que se echan a la carretera para participar en estos encuentros en ciudades más o menos próximas a las suyas. Había motoristas de Cantabria, La Rioja, País Vasco, Madrid y Castilla y León preferentemente. Desde Santander lo hicieron quince representantes del grupo Custom Saron. Uno de ellos, Juan Velasco, recordó que éste era el cuarto año que acudían a la invitación. «Nosotros organizamos una ruta por Cantabria, ellos vienen todos los años y nosotros les devolvemos la visita».

A su juicio esta cita mirandesa «cada año tiene mejor pinta, así que no podemos faltar. Venimos con la intención de pasar un buen día compartiendo experiencias con los amigos, y eso es lo que se consigue; da igual que seas de un sitio o de otro porque al final se crea un ambiente fantástico y disfrutamos así con lo que más nos gusta».

El tiempo acompañó y la ruta transcurrió como cabía esperar. El día se cerró con otra actividad destinada a todos los mirandeses, la fiesta en la Fábrica de Tornillos. «Es otra manera de acercarnos a los mirandeses y dar ambiente a la ciudad, que es importante», apuntó Luigi.