Borrar
Belén Esteban./ Telecinco
Princesa de la 'banlieue'
GENTE

Princesa de la 'banlieue'

Belén Esteban se asoma a la portada del prestigioso 'Le Monde' en calidad de 'reina ibérica de los talk shows'

ARANTZA FURUNDARENA

Martes, 21 de agosto 2012, 19:11

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Isabel Pantoja cuando quiere verse bañada por la luz de los focos se pone en plan Agustina de Aragón de la copla y exclama: «¡Los cañones, hacia mi persona!». A Belén Esteban no le hace falta pedirlo. Los cañones (de luz) siempre apuntan hacia ella. El último en intentar desentrañar este insondable misterio, el porqué del éxito mediático de una mujer sin preparación alguna ni buena imagen ni aparente talento, ha sido el prestigioso diario francés Le Monde. Que Belén Esteban, objeto de sesudos estudios sociológicos, mediáticos, parapsicológicos y filosóficos, aparezca en una portada de Le Monde no es como para echarse las manos a la cabeza. Nos las echaremos cuando sea titular de cabecera de Le Monde Diplomatique, porque entonces sí, esa será la inequívoca señal de que Europa se va definitivamente a pique, el euro se rompe y Angela Merkel se ha echado al monte vestida de tirolesa. Pero hasta entonces, paciencia. ¿Que es increíble que la Esteban comparta portada con Julian Assange? Lo es. Sobre todo cuando Assange para que le hagan un poco de caso ha tenido que desentrañar y airear tremendos secretos de estado y más tarde huir, esconderse, refugiarse en una embajada, ser reclamado internacionalmente y salir al balcón como un heroe clandestino a dar el mitin sobre la libertad de expresión como derecho fundamental, con Garzón de telonero. A Belén, en cambio, para que los cañones (de luz) españoles y ahora franceses apunten hacia su persona le ha bastado con ser la despechada exnovia de un populachero torero y vivir, igual que el famoso tango, «como abrazada a un rencor». Bueno, eso y engullir un montón de bocatas de chorizo ante las cámaras en el plató de Sálvame sin parar de soltar perlas por esa boca, que también tiene su mérito.

¿Y cómo ven los franceses a la que ellos califican de 'Reina ibérica de los talk-shows'? Pues no muy 'pata negra', la verdad. En el retrato que hace la periodista Sandrine Morel de la 'estrella de Telecinco' para el suplemento de televisión de Le Monde de este pasado domingo la define como una mujer «maleducada», «demasiado delgada y con la cara estropeada por la vida»... (la vida por lo visto es el eufemismo que usan en Francia para referirse a un abuso de cirugía estética). Sostiene Morel, tras varios días de convivencia con La Esteban, que a Belén le habría gustado ser monja o ama de casa (todavía está a tiempo) pero que ha terminado convertida en «un juguete de la cadena y del público». Total, que la periodista francesa tampoco se explica el éxito de audiencia de la mal llamada 'princesa del pueblo' (ahora también, 'princesse de la banlieue'). Ni el hecho de que pudiera llegar a captar un hipotético 8% de los votos en caso de presentarse a unas elecciones, «a pesar de su grosera forma de hablar y rudas maneras». Solo le falta añadir a Morel: Sabíamos que en España estaban mal... Pero no tanto.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios