El obispo de Alcalá dice que los gays «se corrompen y se prostituyen»

El obispo de Alcalá de Henares, Juan Antonio Reig Plá, aprovechó la eucaristía del Viernes Santo para arremeter contra el aborto y la homosexualidad. En una misa televisada por La 2, el obispo se refirió en su homilía a aquellas personas «llevadas por tantas ideologías» que no terminan de «orientar bien su sexualidad» y acaban siendo gays. «Piensan desde niños que tienen atracción hacia las personas de su mismo sexo y, a veces, para comprobarlo se corrompen y se prostituyen o van a clubes nocturnos de hombres. Os aseguro que encuentran el infierno», indicó con rotundidad a sus feligreses.

Pero el prelado no sólo arremetió contra los homosexuales, sino también contra los jóvenes que hacen botellón cada fin de semana porque piensan «que van a descubrir el paraíso» y que salen de las discotecas después de una noche de fiesta como «cadáveres ambulantes». Reig Plá también se acordó de las mujeres que, dijo, por culpa de la «malicia del pecado» se ven abocadas a interrumpir su embarazo. «Cuando va a abortar a una clínica, (la madre) sale destruida porque ha destruido una vida inocente y se ha destruido a sí misma. Durante años, mujeres que han ido a abortar llevan el sufrimiento en su corazón y muchas de ellas no pueden dormir y han pasado años y años y años porque el pecado siempre lleva como paga la destrucción de la persona», afirmó.

También advirtió sobre las posibles consecuencias que puede haber en la cercanía de un hombre y una mujer casados en sus puestos de trabajo. Por culpa de la «malicia del pecado», esa proximidad puede despertar en sus corazones «la atracción», lo que puede terminar en «todo un proceso que haga de ellos como si fueran marido y mujer llevando una vida conyugal». Reig Plá aseguró que esta situación es un «engaño» y una «injusticia».

«Exaltaciones homófobas»

La Confederación Española de Asociaciones de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales (Colegas) criticó ayer estas «exaltaciones homófobas» y pidió «respeto a la dignidad de los homosexuales». También respondió a las declaraciones del obispo la presidenta de la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (Felgtb), Boti García Rodrigo, quien le acusó de «fomentar la homofobia y el machismo» con su homilía. «Son palabras que incitan al desprecio y al odio hacia las personas homosexuales y las mujeres», dijo García Rodrigo.

Por su parte, el secretario de Relaciones Institucionales del PSOE, Antonio Hernando, señaló que las declaraciones del obispo demuestran que la Iglesia «se crece cuando gobiernan los suyos». «El PP tiene la virtud de reintroducir a la Iglesia y su moral en el centro de la vida política», declaró.

No es la primera vez que el obispo y presidente de la Subcomisión Episcopal para la Familia y Defensa de la Vida de la Conferencia Episcopal causa sorpresa con sus declaraciones. Antes del comienzo del puente de Semana Santa, se mostró contrario al capitalismo y a la normativa de la Comunidad de Madrid que permite abrir una veintena de festivos al año. A Reig Plá no le gustó la idea y pidió a los creyentes de su diócesis que no fueran a trabajar. «Los creyentes, el domingo y demás días festivos de precepto, deben abstenerse de trabajos o actividades que impidan el culto a Dios», recordó.

El año pasado, aseguró que la familia cristiana era la mejor solución para una «sociedad enferma». Y a finales de 2010, en la presentación de la misa por la familia aseveró que los matrimonios son «menos dados a la violencia doméstica que aquellos que son parejas de hecho, las parejas de personas que viven inestablemente y que es donde más se está generando la violencia contra la mujer».