Un Gernika sin porteros recibe al colista

La derrota por la mínima el pasado fin de semana frente al líder ha hecho daño a los de la villa foral. A pesar de merecer por lo menos un punto ante el Amorebieta, los blanquinegros se fueron de vacío de Urritxe y lo que es peor con su portero titular, Jon Altamira expulsado y sancionado para el próximo partido que tendrá lugar el Jueves Santo, a partir de las cinco de la tarde en Urbieta ante el colista, el Aurrera de Vitoria. Su suplente, Unda, también estará ausente por viaje.

Esta circunstancia obligará al técnico local Jon García a recurrir a dos juveniles del equipo filial, Markel Erleaga y Unai Intxausti. «Hasta el mismo día del envite no decidiremos quien jugará de titular, pero ambos nos transmiten buenas sensaciones. Cualquier baja es importante pero la de un cancerbero es vital porque son ellos quienes paran lo goles», afirmó García.

Psicología

Los gernikarras reciben al último clasificado conscientes de que este partido no se puede escapar. Para ello, jugarán motivados y mentalizados de que se miden a un rival complicado. «Deben afrontar este choque como si jugaran ante el líder, porque si se relajan es cuando nos superan», añadió.

El Aurrera de Vitoria viene de ganar al Santutxu, pero ha perdido todas las opciones matemáticamente. «El fútbol es psicología. Cuando no tienen aspiraciones, porque han tirado la toalla, es cuando se relajan y mejor juegan. En esta disciplina el apartado psicológico es el que mejor hay que trabajar», reconoció Jon García. Para este enfrentamiento, el míster gernikarra contará con el resto del equipo al completo.

De los 34 partidos jugados, el Gernika ha ganado una decena, ha empatado 11 y ha perdido 13. En su estadística particular ha encajado 22 goles y ha materializado 19. Ha conseguido cinco puntos de los quince posibles en las últimas cinco jornadas.