El Eibar mantiene su masa social

El Eibar ha querido salir al paso de las informaciones que apuntan a que el club azulgrana había perdido aproximadamente 400 de sus abonados, alrededor de un 13% de su masa social, con respecto al año pasado. A primera hora de la mañana de ayer, el club armero desmentía estas informaciones.

El club asegura que, a día de hoy, cuenta con 2892 abonados, cinco menos que el año pasado a estas alturas. «Con respecto al año pasado se han dado de baja 37 personas y se han abonado 32 nuevas», declaraba a El Correo, con evidente malestar, el director general del club, Oier Ortega. Precisaba, además, que «la cifra es insignificante, más si tenemos en cuenta que la campaña de abonados finaliza el 20 de marzo, cuando se hace efectivo el tercer plazo de los pagos por abonado». En el club azulgrana no han sentado nada bien estas informaciones. «No sabemos de dónde han podido salir pero desde luego no tienen nada que ver con la realidad y además perjudican más que benefician al club».

En una categoría como la Segunda B, los ingresos en concepto de abonos cobran una relevancia especial debido a la práctica desaparición de los ingresos por derechos de imagen y quinielas. En la estimación presentada por el consejo de administración del club durante la última asamblea de accionistas, el concepto de ingresos por abonos ascendía a algo más del 20 % del presupuesto total. «En ese sentido estamos satisfechos porque se han mantenido los ingresos en concepto de abonados y se han cubierto las estimaciones presupuestarias que presentamos a comienzos de temporada», señala Ortega.

Según los datos manejados por el Eibar, el número de abonados del club a penas se ha visto afectado ni por la profunda crisis económica ni por el descenso de categoría. El club armero se mantiene desde hace varios años, a pesar de las circunstancias, en torno a los 3.000 abonados. Lo curioso del caso es que, de esos 3.000 abonados, raramente la mitad de ellos acuden con regularidad a Ipurua a seguir en directo los partidos de su equipo.

Cambios para el partido

El Eibar recibirá mañana al filial del Osasuna en Ipurua a partir de las 16.00 horas. Tras el varapalo que supuso la derrota en el Carlos Tartiere de Oviedo, es lógico pensar que Mandiola esté planteándose la posibilidad de realizar varios cambios en el equipo. Para empezar, con seguridad, el técnico retornará a la defensa de cuatro hombres.

La gran novedad de la convocatoria y también del once inicial puede ser la vuelta de Gorka Kijera. Tras seis semanas en el dique seco, el defensa hernaniarra parece recuperado de su lesión muscular. La baja de Kijera ha sido uno de los grandes hándicaps para Mandiola esta temporada. Primero una lesión de rodilla y prácticamente a continuación otra muscular, han impedido al defensa guipuzcoano mantener una mínima regularidad esta temporada. Para el puesto de lateral izquierdo, Mandiola no cuenta con más alternativas. El entrenador eibarrés ha probado varias opciones: Erdozia, Alex García o José Rodríguez y ninguno ha terminado de encajar. De ahí la importancia del retorno del único lateral izquierdo específico con el que cuenta Mandiola en su plantilla.

Otro que podría volver al equipo es Alfonso Valín. El defensa vizcaíno se ha recuperado de los problemas físicos que le han impedido jugar las dos últimas semanas y, si finaliza la semana en óptimas condiciones, recuperara su puesto en el eje de la zaga.

En el apartado de ausencias cabe destacar la del delantero Lago Junior, la del extremo izquierdo Alex García y la del defensa Erdozia. Los tres causarán baja mañana por problemas musculares.