Borrar
El modelo usado. Cuesta sólo 70 céntimos y se vende sin pila.
Sabotean con despertadores tres salas de los cines Artea
VIZCAYA

Sabotean con despertadores tres salas de los cines Artea

Las alarmas de hasta 18 relojes sonaron de forma simultánea el viernes durante el pase de tres películas

JOSU GARCIA josugarcia@diario-elcorreo.es

Martes, 26 de octubre 2010, 09:39

Viernes a la noche. Cines del centro comercial Artea. 23.00 horas. En la sala 4 se pasa la película francesa 'Los Seductores'. En la pantalla, la actriz Vanessa Paradis acerca sus sensuales labios a los del protagonista masculino, Romain Duris. De pronto, el soniquete de una alarma rompe la magia del celuloide. Los espectadores piensan que es el teléfono móvil de algún despistado, pero el molesto ruido persiste y nadie consigue hacerlo callar. La gente protesta y un hombre descubre que la causa de tanto estruendo es un despertador camuflado bajo su asiento.

La escena no acaba ahí. Pocos minutos después comienzan a sonar de manera simultánea otros cuatro o cinco relojes. Todos del mismo modelo. Todos programados a la misma hora. Y la sala 4 no es el único lugar donde se produce el insólito episodio. En otros dos auditorios se repite idéntico hecho, casi al mismo tiempo. «Nunca en mi vida profesional había visto nada igual», le espeta un acomodador a uno de los clientes.

Según ha podido saber este diario, la reacción del público ante este acto planificado fue dispar. Hubo quien se lo tomó con humor, pero también quien pensó que podía peligrar su seguridad. Ayer, los portavoces de Cinesa, la empresa que gestiona los cines del centro comercial Artea, calificaron el hecho de «gamberrada». «Nunca nos había sucedido un problema así. Es algo anecdótico. Nadie ha reivindicado nada; ha sido una broma pesada», añadieron las mismas fuentes.

Lo cierto es que, según el relato de uno de los espectadores, el sabotaje estuvo perfectamente planificado. El autor o autores debieron de colarse en las salas antes de que comenzaran las tres sesiones. El despertador empleado es un modelo muy barato que se vende por 70 céntimos de euro en una conocida tienda de muebles. No se incluye la única pila que alimenta el aparato. El bajo precio no impidió que los relojes se dejaran notar en las salas a la hora prefijada.

«Muy embarazoso»

«Primero sonó uno y después todos a la vez», explica Ibai Gutiérrez, que sufrió en sus propias carnes lo sucedido. «Al principio pensé que era mi teléfono móvil, pero estaba apagado. La alarma no paraba y todo el mundo me miraba. Fue molesto y embarazoso porque la gente me gritaba y me recriminaba qué diablos estaba haciendo», recuerda.

Finalmente, el público se percató de que lo que sucedía era algo más que un celular desbocado. Hubo interpretaciones para todos los gustos. «La gente decía que podía tratarse de una campaña de marketing viral; algo hecho 'ex profeso' para promocionar un producto», asegura el testigo. «Otros apuntaron que podía ser un acto de protesta para denunciar la presunta falta de seguridad de los cines, aunque creo que la mayoría pensamos en una simple broma pesada», añade. Por ahora no se han presentado reclamaciones y Cinesa no ha pensado en compensar de alguna forma a los afectados.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo Sabotean con despertadores tres salas de los cines Artea