«No nos debemos mover los demás, sino ETA»

- ¿Confía en el movimiento de la izquierda abertzale hacia las vías políticas?

- Sobre lo que está pasando en ese mundo, hay dos puntos de acuerdo entre las fuerzas políticas. Uno es que la pelota está en el tejado de ETA -que debe tomar la decisión de abandono de las armas que todo el mundo le pide-, y el otro es que hay un consenso amplio, del que participa esa izquierda abertzale cada vez de manera más activa, para apostar por las vías pacíficas y democráticas. Ahí es donde el requerimiento de los partidos debe ser un poco más exigente. La izquierda abertzale, que ha manifestado su voluntad de dar pasos, debe y puede ir más allá. Todas las fuerzas coinciden en que debe moverse en otra dirección si quiere estar en las instituciones. Nada impide que Batasuna, la expresión ilegal de esa izquierda, haga lo que hizo en su día Aralar.

- ¿Comparte la tesis del presidente de los socialistas vascos, Jesús Eguiguren, de que el Gobierno debe ser proactivo en este proceso?

- El escenario no aconseja muchos cambios. En Euskadi se han experimentado ya todas las posibilidades. Ha habido intentos a través de la política para acabar con la violencia terrorista -Lizarra-Garazi, el proceso realizado del PSOE, las conversaciones del PP en Ginebra...- y de todo ello se ha sacado una enseñanza: los puntos de encuentro mayoritario que hoy han calado en las fuerzas políticas. En todo caso, yo diría que hay que ser proactivo cuando cambie el escenario; no nos debemos mover los demás, sino la organización terrorista, que tiene que decir lo que toda la sociedad vasca le está pidiendo. Porque hay una cosa muy clara: donde no hay violencia terrorista, los avances en la política son mucho más amplios. Es el ejemplo de Cataluña.