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MÓNICA BERNET
Miércoles, 4 de agosto 2010, 10:58
Hay quienes aseguran que los videojuegos son el arte del siglo XXI. Tal vez por ese motivo, el pintor vasco José Ibarrola dejó ayer los pinceles y se pasó al mundo virtual para enseñar las posibilidades de 'Art Academy', un nuevo programa que ha desarrollado la compañía Nintendo. «Es una herramienta que permite introducir y enseñar técnicas artísticas de una forma muy sutil y práctica», aseguró. Este videojuego se atreve con la enseñanza de la pintura, hasta el punto de permitir copiar un cuadro de Boticelli o Durero, así como conseguir una buena habilidad -o por lo menos intentarlo- con las herramientas que ofrece la máquina.
José Ibarrola, en su presentación del videojuego, aseguró que las nuevas tecnologías suponen una buena manera para aprender diversas técnicas artísticas. «Y además, lo hacen de forma lúdica y no hay por qué estar disparando a los marcianitos, o en este caso, a los pintores todo el día», bromeó.
El artista se convirtió en profesor de arte por un día para demostrar que se puede perder el miedo al lienzo convirtiéndolo en una superficie virtual. Los videojuegos, reconoció, «no son el futuro del arte, pero tampoco se puede estar de espaldas a las nuevas tecnologías». Por eso quiso dejar claro que «es una buena oferta de seducción y tanto arte como tecnología deberían ir de la mano».
El pintor admitió que al principio no confiaba en la virtualización del arte, pero admitió que «las técnicas que utilizamos para transmitir y enseñar lo que queremos en nuestros cuadros también pueden aprenderse de forma bastante realista con las consolas». Él mismo, tras superar el desconocimiento inicial del mundo tecnológico -también le costó un poco adaptarse al videojuego-, al final le ha cogido el gustillo.
El paso a lo virtual
La consola se ha abierto camino en su profesión, y ahora la emplea como instrumento para recoger ideas o simplemente los bocetos que se le ocurren en el momento más inesperado. «Es genial, puesto que me evita llevar a la playa el caballete, el lienzo, los pinceles y las acuarelas», comentó.
¿Conseguirán las nuevas tecnologías que los artistas dejen a un lado sus pinceles y brochas para realizar sus grandes obras maestras en grandes pantallas de plasma? Ibarrola no o descarta, pero lo ve aún muy lejano.
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