Adjudicadas con una baja del 20% las obras de la cubierta parroquial

Por el momento no deja de ser un acuerdo de carácter provisional sujeto, como cualquier otro, al cumplimiento de procesos administrativos impuestos por la maquinaria oficial que lo elevarán en breve a la condición de definitivo. Pero ya de por sí constituye una de las noticias más relevantes del año en materia de rehabilitación del patrimonio riojano: la Consejería de Cultura culminó el proceso de valoración de la quincena de ofertas que optaban a la ejecución del proyecto de sustitución de la cubierta de Santo Tomás Apóstol y optó por adjudicar el contrato a la empresa vallisoletana Cabero Edificaciones SA por 737.000 euros, cifra que incluye el gravamen del Impuesto sobre el Valor Añadido.

Se trata de una cifra notablemente inferior a la establecida como tipo de licitación cuando se anunció la convocatoria del concurso público. Los redactores del proyecto, que pretende acabar con el desajuste del viguerío de madera y las filtraciones de agua que han provocado hundimientos parciales en el templo, el único edificio de la ciudad jarrera que ostenta la condición de monumento nacional, cifraron la inversión necesaria para la renovación de la cubierta en 926.000 euros. El gasto asumido por el departamento regional se reduce, consecuentemente, en 189.000 euros, algo más del 20%.

No es ése, en todo caso, el único apunte de interés que se extrae de la resolución emitida por el titular de Cultura, Javier García Turza. La constructora reduce, igualmente, el plazo de ejecución previsto por los técnicos y recogido en el pliego de condiciones. Se hablaba en principio de un periodo máximo de ocho meses para la realización de los trabajos. Cabero pretende realizarlos en menos de seis, confirmaron a este medio fuentes del Gobierno riojano.

Las actuaciones llevadas a cabo por esta empresa, en materia de rehabilitación y restauración del patrimonio histórico, se convierte en todo un aval. Cabero ha participado en obras de peso realizadas en toda Castilla y León: entre otros, en el Monasterio de las Huelgas y el Palacio de la Merced de Burgos, en la Iglesia de San Nicolás de Ávila, en la Diputación de Palencia, en la Catedral de Segovia o en San Benito El Real y la Iglesia de Santiago de Cigales en Valladolid.

A pesar de la reducción del tipo de licitación, la actuación prevista en el templo de Haro sigue siendo la intervención más ambiciosa y elevada de cuantas van a ser acometidas por la Consejería de Cultura en los próximos años, por encima incluso del programa sujeto al convenio con la Diócesis. éste implica una inversión trianual de 1,2 millones en una docena de obras. La de Santo Tomás se hará en un año.