«Si ven a la leona, no corran»

Una leona anda suelta. Mossos d'Esquadra, agentes rurales, miembros del Seprona de la Guardia Civil, bomberos y policías locales de diferentes poblaciones llevan desde el sábado buscando a la fiera en la sierra que limita las provincias de Tarragona, Castellón y Teruel. Nadie hasta el momento ha denunciado su desaparición, aunque se especula con que podría haberse escapado de un zoo, de un circo o, incluso, del domicilio particular de alguien que la habría criado de forma ilegal.

El felino fue visto por primera vez el sábado. El alcalde de La Senia (Tarragona), Víctor Pla, explicó ayer que dos hombres que corrían por el monte se cruzaron con la fiera. «Vimos un animal muy grande y, cuando intentamos espantarlo, nos dimos cuenta de que parecía una leona. El animal no tuvo ninguna reacción extraña y siguió caminando despacio por el lugar», explicó Jordi Marcobal.

Asustados por la presencia del depredador, ambos atletas optaron por regresar a La Senia e, inmediatamente, acudieron a la Policía Local de la población. En ese momento se inició el dispositivo de búsqueda, que se vio reforzado después de que durante el fin de semana, vecinos del Molino del Abad, entre La Senia y la Pobla de Benifassà, advirtieran a los agentes rurales sobre la presencia del animal en el pueblo. Se cree que se habría acercado a la población para buscar comida en los cubos de basura. Las brigadas rurales confirmaron ayer que la leona ha comido pollos muertos de una granja situada a tres kilómetros de La Senia. Mari Carmen se encontró a la fiera merodeando junto a su granja. «Siempre salgo sola y ayer por la mañana salí con compañía, porque tenía miedo. Hasta que no sepa que la han atrapado no volveré a ir sola», señaló.

Huellas de pisadas

Las pisadas halladas junto a los contenedores y en las cercanías de la granja de aves son las pruebas físicas de la existencia del felino con las que cuentan los cuerpos policiales, que ayer sumaron dos helicópteros a las labores de búsqueda.

Aunque los Mossos d'Esquadra han puesto carteles en la zona alertando de la presencia del animal, se teme que granjeros o cazadores de la zona traten de matar a la leona por su cuenta. Por si acaso, los expertos recomiendan a quien se cruce con un animal semejante que mantenga la calma, no grite y, sobre todo, no eche a correr, porque podría asustar al felino, lo cual es muy peligroso. El alcalde de Rossell, Evaristo Martí, ha ordenado la difusión de un bando en el que se alerta a los vecinos de la presencia del animal y del peligro que podría acarrear encontrárselo de frente.

Sociedades protectoras de animales, como AnimaNaturalis, pidieron ayer que no se mate a la leona y que se localice al circo o particular responsable del felino para que sea «sancionado».