Hallan culpable de asesinato al joven que apuñaló a un soldado en Zorroza

«Después de las deliberaciones, encontramos a José Luis L. culpable de asesinato, y a Cristina C. culpable de encubrimiento». El portavoz del jurado popular seleccionado para el caso del crimen de las galerías de Zorroza, cometido en marzo de 2007, leyó el veredicto a las seis menos veinte de la tarde de ayer, después de un día y medio desde que comenzaran a deliberar, el pasado jueves por la tarde.

De esta forma, los nueve miembros del tribunal, más dos suplentes, asumieron la versión de los hechos planteada durante el juicio por el fiscal y la acusación particular, que consideraban que José Luis L. había matado a Aitor a sangre fría, después de mantener una discusión verbal con él y de seguirle hasta el descansillo de un pub, en el subterráneo Omega del barrio bilbaíno de Zorroza, donde ambos habían acudido con sus respectivos allegados a tomar copas.

A lo largo de las cuatro sesiones de la vista oral, las acusaciones fueron desmontando la legítima defensa alegada por el procesado.

Tras conocer la decisión, que fue acogida con lágrimas por los padres y otros familiares y amigos de la víctima sentados entre el público, las partes detallaron sus respectivas peticiones de penas para ambos reos. El representante del Ministerio público fue el único en mantener su solicitud inicial, la de 17 años y medio de cárcel por el delito de asesinato para el principal acusado, y de 21 meses de prisión para Cristina C, acusada de complicidad al ocultar el arma homicida, un estilete, detrás de una máquina recreativa del local. El jurado se mostró partidario de la suspensión de la pena en este segundo caso, a la que no se opusieron ni acusaciones ni defensas.

«Perdón sincero»

Respecto a la responsabilidad civil, la Fiscalía fijó una indemnización de 100.000 euros para los padres de Aitor, y 25.000 para el hermano.

Por su parte, la acusación particular, a la luz de los hechos considerados probados por el tribunal popular, elevó su petición de condena para equipararla a la del fiscal, por el «reproche social que merece su acción, y por la actitud del acusado durante el juicio de falta de perdón sincero». En cuanto a las indemnizaciones, y al tratarse de «una muerte violenta», propuso la cantidad de 120.000 euros para los padres y de 30.000 para el hermano.

La defensa de José Luis pidió la pena mínima de 15 años de cárcel, en atención a la edad, 23 años, y a la «colaboración y arrepentimiento sincero» de su patrocinado, además de rebajar a 40.000 euros la indemnización para la familia del fallecido.

La abogada de Cristina C. reclamó seis meses de prisión, a sustituir por la pena de trabajos en beneficio de la comunidad o por una multa cuando se ejecute la sentencia. El magistrado-presidente de la Sección Sexta tendrá ahora que dictar sentencia.