La fusión con la feria de Colonia afianza el liderazgo europeo de Ferroforma

Aunque las crisis nunca son bien recibidas, la actual no llega en el peor momento para Ferroforma. El certamen de la ferretería y el bricolaje, buque insignia del BEC junto a la bienal de la máquina herramienta, ha reforzado este año su liderazgo en Europa gracias al acuerdo alcanzado con la pionera feria de Colonia (Practical World). Un pacto entre los dos gigantes del sector que aspira a «mejorar la calidad de los productos» y a «incrementar las ventas» de los expositores.

Tras casi un lustro de negociaciones, el acuerdo se alcanzó hace dos años, aunque no se ha plasmado hasta el certamen que se inauguró ayer en Barakaldo. En principio, la alianza contempla la celebración alterna del evento en Alemania y el BEC «para no competir en el calendario», aunque va más allá. «Existen hasta intereses económicos mutuos en los resultados de ambas ferias», asegura el máximo responsable de Ferroforma, Ángel Pereda. Varios carteles en el recinto de Ansio animan ya a visitar Colonia el año que viene.

Gracias al acuerdo con Practical World se ha puesto en marcha un equipo comercial conjunto que aprovechará sus respectivos contactos para captar a un mayor número de profesionales, aunque su esfuerzo no se ha traducido este año en resultados debido a la recesión económica mundial. Su objetivo será también atraer a nuevos grupos de potenciales clientes para garantizar un determinado volumen de ventas.

«Punto de inflexión»

En su lucha por alcanzar «los máximos niveles de calidad» en ambos certámenes, la fusión ha cristalizado también en un compromiso para evitar el pirateo de productos, al que son especialmente proclives los países orientales. «Todos nuestros asistentes están obligados a firmar un protocolo en el que se comprometen a respetar el libre comercio sin copiar los artículos de otros expositores», explica Pereda. Varios abogados especialistas velan por su cumplimiento desde un puesto informativo ubicado en el BEC.

Lo cierto es que el esfuerzo se antoja «necesario» para hacer frente a la crisis del bricolaje y la ferretería, «asociada a la decadencia de sectores como la automoción o la construcción». «Las exportaciones de las empresas vascas al extranjero se han reducido en lo que va de año hasta un 25%», reveló ayer la consejera de Industria en funciones, Ana Agirre, durante la inauguración de la feria. Una caída que dobla incluso este porcentaje si se tienen en cuenta las relaciones comerciales con otras regiones de España.

«Ferroforma es una gran oportunidad para exponer e internacionalizar productos», recordó Agirre, quien confió en que el certamen sirva de «punto de inflexión» para que el año concluya «con nuevas operaciones que se empiecen a desarrollar aquí». De momento, la primera jornada se saldó con una importante afluencia de público y «satisfacción» entre los expositores, pese a que los días más fuertes del certamen serán «hoy y mañana».