La CEOE pide abaratar el despido

Los empresarios creen que despedir trabajadores sale muy caro, y achacan al actual sistema de protección del empleo el paro masivo que asola el mercado laboral.

La patronal CEOE reaccionó ayer a la afirmación de José Luis Rodríguez Zapatero de que no abaratará el despido, haciendo suya la propuesta formulada la semana pasada por la Confederación Empresarial de Madrid, que pidió instaurar un 'contrato anticrisis' que rebaje a 20 días por año trabajado el coste de echar empleados frente a los actuales 45 días. Los patronos creen que, por culpa de esa salvaguardia, en momentos de inseguridad el empresario despide cuanto antes para que le resulte lo más barato posible.

El presidente de CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, describió ayer las propuestas de sus colegas madrileños como «muy sensatas» y consideró su aplicación «absolutamente necesaria» para frenar la sangría de puestos de trabajo.

Asimismo, a juicio del presidente de la Comisión de Economía de CEOE, José Luis Feito, la negativa del presidente del Gobierno a abaratar el despido «es una decisión que, aunque pueda parecer paradójico, es perjudicial para los que se quiere beneficiar, que son fundamentalmente quienes tienen un puesto de trabajo que corre peligro, los desempleados o los que se incorporan por primera vez al mercado de trabajo», aseguró.

Por su parte, el vicepresidente económico del Gobierno, Pedro Solbes, rechazó entrar en un debate que a su juicio debe de abordarse en la Mesa de Diálogo Social, donde están representados tanto la patronal como los sindicatos.

El rechazo de las centrales fue rotundo. El secretario general de UGT, Cándido Méndez, aseguró que lo que proponen los empresarios no supone un contrato contra la crisis, sino «un despido por la crisis»; mientras que CC OO indicó que abaratar el despido no evitará la destrucción de empleos, sino que facilitará que los empresarios tengan la «tentación» de deshacerse de más personal.

Ayudas al ladrillo

Precisamente el paro, que se sitúa ya en 3,3 millones de desempleados, centrará el debate de hoy en el Congreso de los Diputados, en el que el presidente del Gobierno repasará las iniciativas adoptadas hasta la fecha para combatir la recesión y explicará sus resultados.

Uno de los sectores más castigados por la crisis, el de la construcción, reclamó ayer al Gobierno la creación de un Fondo de Adquisición de Activos Inmobiliarios -similar al puesto a disposición de la banca- con el que el Estado compre directamente las casas que los promotores no pueden vender, y que son más de 600.000.

El presidente de la patronal de los promotores e inmobiliarios (APCE), José Manuel Galindo, cifró en 900.000 los parados que podría generar el negocio del ladrillo entre 2008 y el presente ejercicio.

La APCE propone también que el Estado subvencione un tercio de la renta en aquellos pisos que los empresarios pusieran en el mercado del alquiler con opción a compra, y rebajar del actual 16% hasta el 4% el IVA a los inquilinos de esos pisos que optaran por ejecutar su opción de compra.