Eroski arranca la maquinaria para aplicar medidas de austeridad frente a la crisis

Eroski ya ha puesto en marcha el pocedimiento para aprobar y aplicar las medidas de austeridad que ha diseñado con el fin de hacer frente a los efectos de la crisis económica, que ya está povocado una importante caída del consumo y amenaza con empeorar el próximo año: congelación salarial para los más de 8.000 socios del grupo vasco y capitalización de la cantidad que reciben por los intereses de sus participaciones en la sociedad.

El primer paso en este proceso se produjo, según ha podido saber EL CORREO, el pasado martes. Más de 300 delegados -representantes de los trabajadores de la cooperativa- celebraron una asamblea extraordinaria en Bilbao Exhibitión Centre (BEC) para tratar los dos mecanismos de defensa con los que Eroski pretende ajustarse a la coyuntura sin acudir a medidas más severas que ya están aplicando otras compañías; por ejemplo, ajustes de personal.

En el multitudinario encuentro, el director general de la firma, Agustín Markaide, explicó a los congregados el alcance de las medidas. Pese a la polémica suscitada inicialmente entre los socios trabajadores por ambas propuestas, la reunión se celebró, según los medios consultados, en un «buen clima y con un espíritu constructivo» que permtió llegar a «propuestas consensuadas».

Calendario

Bajo ese esquema, se definieron los protocolos y los calendarios que se van a seguir para tratar de aprobar y aplicar las dos actuaciones contempladas. En el caso de la congelación salarial, se prevé que el consejo social de Eroski dé el visto bueno en las próximas semanas a la iniciativa, que sería definitivamente ratificada en enero por el consejo rector del grupo cooperativo.

En lo que respecta a la capitalización de intereses, su puesta en marcha requerirá la aprobación previa de los socios. El calendario abarca varios meses. Eroski celebrará el 17 de enero un cónclave extraordinario para abordar otra cuestión, el nuevo modelo para convertirse en la mayor cooperativa del mundo. La reunión se aprovechará para tratar la congelación temporal del cobro del dividendo por la participación en el capital. Está previsto que se celebre una votación y se adopte una decisión preliminar. No obstante -y de acuerdo a la normativa vigente- la postura tendrá que ser ratificada en una asamblea ordinaria que se desarrollará, muy posiblemente, el próximo mes de junio.