«No nos moverán», advierten los usuarios del Reina de la Paz

«Esta lucha me está dando años de vida». La octogenaria María caminaba ayer despacio pero resuelta. Ayudada de un bastón marrón de madera y con un cartel reivindicativo a la espalda, la mujer avanzaba por la Gran Vía gritando consignas contra la BBK y la Diputación por el inminente desalojo de los 325 usuarios de la residencia Reina de la Paz de Ibarrekolanda. No estaba sola: alrededor de 300 personas respondieron a la convocatoria realizada para exigir al gestor del centro, la caja de ahorros, que «respete nuestros hogares» y no derribe el edificio.

La protesta comenzó a las once y media de la mañana. Residentes, familiares, miembros de asociaciones y representantes de todos los partidos políticos salvo el PNV se concentraron en la Plaza Circular para hacer oír sus proclamas.

Al grito de 'La BBK está sorda', los manifestantes, tocados todos con un simbólico botón rojo en la solapa, comenzaron a caminar hacia la sede de la entidad bancaria. La marcha estaba encabezada por varias mujeres en silla de ruedas. Por detrás, el resto de asistentes lucieron carteles llamando a «la resistencia» y la «lucha» para forzar a los patronos de la residencia a desistir en su proyecto de levantar en el futuro un nuevo bloque con servicios para ancianos, discapacitados y jóvenes. Los mayores, ayudados por sus familiares, hicieron todo un alarde de imaginación reivindicativa. Desde el tradicional 'No nos moverán' al rabiosamente moderno 'Yes, we can; its our right' ('Sí, podemos; es nuestro derecho'), el grito de campaña de Barack Obama.

Dardos contra el PNV

Durante el recorrido, los manifestantes lanzaron también afilados dardos: 'PNV te esperamos en las autonómicas' o 'Aburto -diputado de Bienestar Social- no hay derecho, La Paz es nuestro techo', al tiempo que conminaron a los viandantes a sacar su dinero de la BBK «porque está desguazando su obra social».

Una hora después de iniciar la protesta, los asistentes llegaron a la sede de la caja de ahorros y dieron paso a la lectura de un comunicado. «Nuestros mayores están demostrando una resistencia heroica y no están cediendo ante la poderosa BBK, que ha presionado de forma indecente para que acepten marcharse de su hogar», aseguró uno de los portavoces, quien advirtió de que «lucharemos hasta el final, porque estamos cargados de razones».