Los pescadores de Bermeo piden tabaco al rey (y otras noticias de hace un siglo)
Tiempo de historias ·
La prensa local de marzo de 1920 estaba cargada de sucesos terribles: un niño que venía a trabajar en una fábrica y acabó ahogado, una mujer abrasada en su cocina, un ciego que se suicidó de un tiro, un padre que se atravesó el pulmón con una bala cuando jugaba con su hijo...CARLOS BENITO
Martes, 17 de marzo 2020, 00:55
Ha llegado el momento de retroceder un siglo. Bienvenidos a las noticias de marzo de 1920, que nos muestran un Bilbao y una Bizkaia a veces sorprendentes en su diferencia y otras, extrañamente parecidos a los nuestros: como cada mes, copiaremos una selección procedente de 'El Pueblo Vasco' y centrada en los sucesos, los avisos oficiales y la publicidad más local. No son todas las noticias de la misma fecha, sino que se fueron publicando a lo largo del mes correspondiente, y están tal cual, con mínimas adaptaciones en la ortografía y la puntuación.
Los pescadores de Bermeo solicitan del Rey el envío de tabaco. Leemos en 'El Sol', en telegrama de su corresponsal en Bilbao: «El presidente de la Cofradía de Pescadores de Bermeo ha dirigido un telegrama al mayordomo de Palacio que ruega transmita a Su Majestad, en nombre de dos mil asociados, diciendo que tienen que salir al mar, que desde hace cuarenta y cinco días están sin fumar y que ruega que se abastezca de tabaco a dicha población. El mayordomo mayor de Palacio ha contestado manifestando que el Rey, interesándose por los pescadores, había solicitado del ministro de Hacienda que disponga el envío de tabajo. Mañana se repartirá una saca en dicha villa; la noticia ha sido recibida con gran alegría».
Muerte del Sr. Meyers. En Portugalete un desgraciado accidente ha venido a aumentar el luto de una familia que ya hubo de derramar lágrimas de acerbo dolor el pasado verano, al ser señalada por la mano roja del sindicalismo. Don Juan P. Meyers, que en el pasado agosto perdió a su virtuosa señora cuando dos criminales atentaron contra su vida, dejó anteayer de existir. El hecho ocurrió como lo vamos a relatar. Se hallaba el señor Meyers jugando con uno de sus hijos, al que iba a llevar a misa. En uno de los movimientos que hizo para recoger a su hijo y levantarlo en alto, se enganchó la mano en el gatillo del revólver que llevaba en uno de los bolsillos del chaleco y el arma, que por lo visto no estaba en el seguro, se disparó. La bala fue a atravesarle el pulmón derecho. El mismo señor Meyers, al darse cuenta de la gravedad que podía tener lo ocurrido, encargó que se llamase al médico en tanto que se trasladaba a la cama, pero, para cuando llegó el doctor a la casa, había fallecido ya don Juan P. Meyers (...).
Otro sustituto que vuela. En la casa-cuartel de la Guardia Civil de Durango denunció Antonio Beñarán que, habiendo correspondido servir en Ceuta a Benito Ormazábal, contrató como sustituto a Miguel Ruiz, el cual, no bien cobró la cantidad convenida, 400 pesetas, desapareció del pueblo.
El descanso dominical y los taberneros. En vista de las constantes infracciones que vienen cometiendo los dueños de los establecimientos de bebidas de la ley de descanso dominical, que prohíbe la apertura de dichos establecimientos los domingos, los cabos de la guardia municipal y el personal de dicho cuerpo a sus órdenes redoblaron la vigilancia el domingo, con el fin de velar por el exacto cumplimiento de aquel precepto legal. Como resultado de sus desvelos, que no en balde se impusieron, resultaron denunciados 27 taberneros que infringieron la ley del descanso, a los cuales el alcalde impuso un fuerte correctivo.
Niño ahogado. En el muelle de Ripa se cayó al agua en la tarde de ayer, desde la goleta 'Lealtad', el niño de doce años José Lista Ferreiro. Su padre, que es el patrón de la goleta, le había traído de Gijón para colocarlo en alguna fábrica. Pretendió con algunos otros dar con el cuerpo de chiquillo, pero no fue posible. Se supone que ha perecido ahogado.
Un curda escandaloso. La noche del lunes se encontraba en una taberna de la calle García Salazar Francisco Llano Pinedo, de 27 años, y, como estaba completamente borracho, insultaba a todo el mundo. El dueño del establecimiento requirió el auxilio del guardia de servicio en Hurtado de Amézaga para arrojarle de la taberna, pero el curda no quiso obedecerle y, por no ir a la comisaría, se arrojó al suelo repetidas veces, favorecido por el público, que se puso de su parte. El espectáculo final fue de lo más lamentable que darse puede y los agentes de la autoridad tuvieron que dejar libre al borracho para que cesara el tumulto.
Otro herido. En el hospital de Basurto ingresó ayer Telesforo Gutiérrez, viudo, de 38 años, natural de Tudela. Se encontraba este en su domicilio del Desierto con un amigo que examinaba un revólver cuando se disparó este y el proyectil alcanzó a Telesforo en el brazo izquierdo, por su centro inferior, donde quedó incrustado.
Una joven perece abrasada. Hallándose en la cocina de su casa de Galdames, ocupada en sus labores domésticas, a la joven de veinte años Elena Larrea se le prendieron fuego las ropas, que ardieron con gran pompa. Elena resultó con tan grandes quemaduras en la cara y en brazos que falleció en el hospital civil de Basurto, donde fue traída en automóvil para que se le practicara la primera cura.
No hubieran estado mal con arroz. En la madrugada de ayer, el cabo de la guardia municipal don José Méndez detuvo en la calle de San Francisco a Ramón del Río Arza y Miguel Tordera López, los cuales llevaban una gallina cada uno, cuya procedencia no pudieron justificar, pero que luego se supo que pertenecían a don Andrés Catajorana, del barrio Mala Espera.
Entre obreros. Sixto Cano y Esteban Pérez, panaderos que trabajan en una misma tahona de Ortuella, cuestionaron fuertemente el domingo por resentimientos antiguos, hallándose en estado de embriaguez. Fueron separados por los amigos de ambos, pero, habiéndose encontrado poco más tarde, Sixto hizo con un arma corta cinco disparos sobre Esteban, que milagrosamente resultó ileso.
Fallecimiento. En el hospital civil de Basurto, donde ingresó hace unos días, víctima de las heridas que se causó con un arma de fuego, falleció ayer el desventurado ciego Formerio Laorden, que, como ya saben nuestros lectores, intentó poner fin a sus días disparándose un tiro en la sien.
Robo en una fotografía. Por los inspectores de la policía municipal fue ayer detenido Carlos Lascaray, de 64 años, sobre el que recaían sospechas. Efectivamente, al ser detenido, se confesó autor del robo cometido días pasados en la fotografía que en la calle del Correo tiene Shylok. Dijo que, al cerrar la casa el dueño, se quedó dentro él, esperando a trabajar sobre seguro. Salió luego y se apoderó de 800 ptas. en papel y plata y un décimo de la lotería correspondiente al próximo sorteo. Se llevó asimismo una máquina fotográfica con sus accesorios, valorada en 450 pesetas; un objetivo de 500 pesetas; otro de 200; dos pañuelos, un cepillo y otras cosas que el dueño de la fotografía guardaba en un baúl.
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