Zabaldegia se consagra en la cocina
La sociedad de la calle Postas obtiene la recompensa a dos platos excelentes como colofón a un certamen popular «cada vez mejor»
En ausencia de ventanas al exterior, de panorámicas, y eso que guisa en un lugar céntrico como la calle Postas, Zabaldegia cuenta con una ... razón más para mirar a su interior y contemplar nuevas conquistas sobre sus pobladas estanterías de copas, diplomas y demás. Suyos son ya el trofeo y el cheque de 500 euros que les distingue como la mejor entre los fogones del XXIII Concurso de Sociedades Gastronómicas de Álava, organizado por EL CORREO y patrocinado por la Diputación. La noche del viernes se celebró en el Gran Hotel Lakua la última cena, la de gala, con prácticamente 180 comensales, la vez que más, que se lo pasaron en grande. El certamen apaga el fuego y guarda los cacharros hasta dentro de unos meses mientras se despide agradecido a los patrocinadores Bacalao Giraldo, Cárnicas Sáenz, Bodegas Zintzo, Artepan, Udapa, Cafés La Brasileña, Makro y Arabako Txakolina por su aportación.
Zabaldegi es el brillante campeón de 2019. Ya lo fue antes y tradicionalmente ha rondado las primeras posiciones, de manera que su candidatura figuraba entre las previsibles, sobre todo después de redirigir su cocina tan sofisticada y hacerla más cercana a lo popular sin perder excelencia. El jurado que preside Alberto López de Ipiña le aupó con 166 puntos sobre un máximo de 210. Así que tampoco se dejó muchos en la gatera. Su bacalao con crema de coliflor estuvo entre los más sabrosos, pero fue realmente el segundo plato, 'onglet'a la parrilla con cristales de patata, el que le consagró. Un solomillo asado al fuego de un chulengo (parrilla portátil de origen sudamericano) y cortado por los críticos con unos cuchillos gauchos, facones. Todo un detalle.
La ganadora aventajó en nueve puntos a la segunda, Gaupatxa, y en uno más a la tercera, la debutante Artesilla. «Hemos elegido muy bien las recetas. La carne fue un puntazo por su elaboración y el bacalao lo tenemos más que trabajado de otros años», significó Guillermo Bello, argentino, después de la proclamación junto a sus compañeros de manos del diputado general de Álava, Ramiro González.
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Emoción de Salinas
Gaupatxa, segunda, ronda el liderato desde hace tiempo. En la edición pasada hizo el mejor bacalao, una trilogía, y ahora ha cuadrado los menús, pero no le ha dado para alcanzar a la inalcanzable Zabaldegia. Aun así, su nutrida representación, más de treinta socios, entonó el «¡Campeones!» en el banquete cuando Maite Maqueda, directora comercial de EL CORREO, les hizo entrega de las distinciones, 300 euros y galardón. La sorpresa de la noche, aunque no tanto, la protagonizó Artesilla, desde Leza, que hizo coincidir su estreno en el campeonato con el tercer puesto. El diputado foral de Agricultura, Eduardo Aguinaco, que precisamente asistió a la velada del debut riojanoalavés, dio al txoko rural los 100 euros y un presente culinario. En cuarto lugar quedó Bustinzuri-Gaztedi, otro txoko de los que cocinan con buena mano, y quinto, Zapardiel, más de lo mismo con el archiconocido delantal de José Antonio Arberas.
Conducido por el 'showman' Roberto Rejado, el festival gastronómico dio mucho más de sí. La hamburguesa de la también debutante Txipristin, todo una ocurrencia sobre el plato, y la sabrosa zurrukutuna (sopa) con taco de bacalao de los mocetones de Eskola Zaharra triunfaron como mejor carne y pescado, respectivamente. La gratitud más íntima viajó a Salinas de Añana con el trofeo Silverio Quintana de la mano de los irreductibles de Gatzalde. Solo su gente sabe lo que costó montar la cena un jueves, y de ahí el detalle de la organización, de María Goti, directora gerente de EL CORREO, y el sorpresón del alcalde del lugar, Juan Carlos Medina.
La XXIII edición deja sabores y aromas. Ipiña se refirió a platos «excelentes» y a un certamen «cada vez mejor» y más nutrido. «Ha sido un maratón de dos meses y casi veinte sociedades. Un esfuerzo tremendo».
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