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Zambullidas en el plástico

A Sandy Lam, de 68 años, le gusta zambullirse en las aguas del puerto de Hong Kong. Él (con una toalla blanca) y la mayor parte de los veteranos personajes que aparecen en las fotos llevan haciéndolo durante décadas frente al corazón financiero de la isla, rodeados de contenedores, ferris y barcos de pesca. A todos les une el deseo de mantenerse en forma. Su única queja es la contaminación: «Noto que hay más plástico en el mar. Es muy distinto a cuando nadaba aquí de pequeño. En el futuro será un problema.»

Sábado, 3 de noviembre 2018, 23:50

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A Sandy Lam, de 68 años, le gusta zambullirse en las aguas del puerto de Hong Kong. Él (con una toalla blanca) y la mayor parte de los veteranos personajes que aparecen en las fotos llevan haciéndolo durante décadas frente al corazón financiero de la isla, rodeados de contenedores, ferris y barcos de pesca. A todos les une el deseo de mantenerse en forma. Su única queja es la contaminación: «Noto que hay más plástico en el mar. Es muy distinto a cuando nadaba aquí de pequeño. En el futuro será un problema.»

REUTERS
A Sandy Lam, de 68 años, le gusta zambullirse en las aguas del puerto de Hong Kong. Él (con una toalla blanca) y la mayor parte de los veteranos personajes que aparecen en las fotos llevan haciéndolo durante décadas frente al corazón financiero de la isla, rodeados de contenedores, ferris y barcos de pesca. A todos les une el deseo de mantenerse en forma. Su única queja es la contaminación: «Noto que hay más plástico en el mar. Es muy distinto a cuando nadaba aquí de pequeño. En el futuro será un problema.»
A Sandy Lam, de 68 años, le gusta zambullirse en las aguas del puerto de Hong Kong. Él (con una toalla blanca) y la mayor parte de los veteranos personajes que aparecen en las fotos llevan haciéndolo durante décadas frente al corazón financiero de la isla, rodeados de contenedores, ferris y barcos de pesca. A todos les une el deseo de mantenerse en forma. Su única queja es la contaminación: «Noto que hay más plástico en el mar. Es muy distinto a cuando nadaba aquí de pequeño. En el futuro será un problema.»

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A Sandy Lam, de 68 años, le gusta zambullirse en las aguas del puerto de Hong Kong. Él (con una toalla blanca) y la mayor parte de los veteranos personajes que aparecen en las fotos llevan haciéndolo durante décadas frente al corazón financiero de la isla, rodeados de contenedores, ferris y barcos de pesca. A todos les une el deseo de mantenerse en forma. Su única queja es la contaminación: «Noto que hay más plástico en el mar. Es muy distinto a cuando nadaba aquí de pequeño. En el futuro será un problema.»
A Sandy Lam, de 68 años, le gusta zambullirse en las aguas del puerto de Hong Kong. Él (con una toalla blanca) y la mayor parte de los veteranos personajes que aparecen en las fotos llevan haciéndolo durante décadas frente al corazón financiero de la isla, rodeados de contenedores, ferris y barcos de pesca. A todos les une el deseo de mantenerse en forma. Su única queja es la contaminación: «Noto que hay más plástico en el mar. Es muy distinto a cuando nadaba aquí de pequeño. En el futuro será un problema.»

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