¿Estamos peor que hace un año?

Sinceramente creo que no, estamos mucho mejor y hay motivos para un optimismo moderado. Es verdad que el nivel de incertidumbre sigue siendo alto y que seguimos inmersos en una pandemia mundial. Pero, si recordamos, fue el 27 de diciembre de 2020 cuando se vacunó la primera persona en España, Araceli, una dulce ancianita de 97 años. Un año después, casi el 80% de la población tiene ya la pauta completa. El 89% de los mayores de 12 años y el 98% de los mayores de 60 años están vacunados, muchos de ellos incluso ya con la tercera dosis. Son cifras espectaculares, de las mayores del mundo. Los datos demuestran además que las vacunas están siendo muy efectivas en reducir la gravedad de la enfermad, los ingresos hospitalarios y los fallecimientos. No hay más que fijarse en la quinta ola: un alto número de casos, probablemente debido a la variante delta más transmisible, pero que no fue acompañado por un pico de fallecimientos. Ojalá esta sexta ola sea similar o incluso mejor.

Esta época del año es la temporada de los mocos, resfriados, catarros, bronquitis, neumonías, gripe… y coronavirus. Las estadísticas de mortalidad a lo largo del año (antes de la pandemia) demuestran que siempre muere más gente en invierno que en verano. Hay cientos de virus y bacterias que se trasmiten por el aire y causan este tipo de problemas respiratorios. Es previsible, por tanto, que cada año haya un pico de incidencia y que el sistema sanitario sufra cierta tensión y acumulación de pacientes. Este invierno, en medio de una pandemia mundial, era más que previsible el colapso del sistema. Como hemos visto, la inmensa mayoría de los ciudadanos hemos sido obedientes, hemos cumplido y nos hemos vacunado. ¿De quién es la responsabilidad de que ahora el sistema sanitario esté a tope?

Llevamos ya más de 20 meses de pandemia. ¿Cuántos médicos y enfermeros se han contratado?, ¿cómo se han reforzado la atención primaria y los servicios de urgencias?, ¿cuántas camas de UCI se han ampliado? En los presupuestos que ahora se discuten, ¿cuánto se ha añadido a la partida para sanidad?, ¿por qué no se ha reformado el sistema jurídico para evitar que las autorizaciones dependan de la decisión de un solo juez?, ¿por qué seguimos con medidas diferentes según el territorio?...

Estamos mucho mejor que hace un año. La incidencia sigue subiendo, seamos muy prudentes… pero repartamos responsabilidades.