El peligro de comer la piel del pescado
La Fundación Española del Corazón advierte de que consumirla puede ser malo para la salud
«El valor nutritivo del pescado se encuentra fundamentalmente en su carne. La piel no aporta nutrientes y puede contener contaminantes nocivos para la salud por lo que es mejor desecharla», afirma la Fundación Española del Corazón.
Hasta hace poco tiempo apartábamos la piel del pescado a un lado del plato pero últimamente se ha puesto de moda comerla. Los chefs ahora suelen cocinarla de forma que quede crujiente y aporte una textura diferente, un detalle culinario que cada vez gana más adeptos.
Sin embargo los mares están cada vez más contaminados, y con ellos todo el pescado que consumimos. No en vano, se recomienda que las embarazadas y niños menores de diez años no consuman pez espada, atún rojo, tiburón (cazón), y lucio por su alto contenido en mercurio (metilmercurio). Según la Agencia Española de Seguridad Alimentaría y Nutrición (Aesan), las especies con bajo contenido en mercurio son, abadejo, anchoa, boquerón, arenque, bacalao entre otros.
Beneficios del pescado para la salud
A pesar de estas indicaciones sobre la piel y el mercurio, es necesario resaltar que el consumo de pescado es beneficioso para la salud. La Aesan aconseja comer pescado varias veces por semana, ya que es «seguro y saludable» y «una parte fundamental dentro de la dieta mediterránea».
Por su parte, la Fundación Española del Corazón resalta que «la grasa del pescado es rica en ácidos grasos poliinsaturados omega 3 que ayudan a prevenir las enfermedades del corazón». Además, «aporta proteínas de alta calidad, grasas (omega 3), vitaminas, fundamentalmente del grupo B (B1, B2, B3,B12) liposolubles (A y D), minerales (fósforo, potasio, calcio, yodo, hierro, magnesio) y grasas (en cantidad variable dependiendo de la especie)».