Los pasos que hay que dar al día para reducir la probabilidad de sufrir un infarto según un médico vizcaíno

Las enfermedades cardiovasculares constituyen la primera causa de muerte a nivel mundial. En Euskadi son responsables de 184,8 fallecimientos por cada 100.000 habitantes y afectan, aproximadamente, a una horquilla entre el 21 y el 37% de las mujeres y entre el 34 y el 50% de los hombres mayores de 18 años. Con motivo del Día Europeo para la Prevención del Riesgo Cardiovascular, que se conmemora este 14 de marzo, Álvaro Ortiz de Salazar, cirujano cardiovascular de la Clínica IMQ Zorrotzaurre, da las claves para mantener sano el corazón.

Según señala el especialista, la actividad física regular es fundamental. La revista 'British Journal of Sports Medicine' desmontó hace unos meses el mito de los 10.000 pasos diarios. Se trata de la cifra, equivalente a unos 7 kilómetros, que se venía recomendando caminar cada día para conseguir importantes beneficios para la salud cardiovascular como reducir la posibilidad de sufrir un infarto o mantener a raya el colesterol.

El doctor vizcaíno asegura que «cuando una persona se vuelve sedentaria, acumula enfermedad cardiovascular en forma de aterosclerosis generalizada, es decir, no solamente en las arterias coronarias sino también en los vasos arteriales de todo el organismo». En este sentido, arenga a «caminar una hora al día, ya que puede reducir significativamente el riesgo cardiovascular». Sin embargo, recuerda que «realizar ejercicio físico de intensidad moderada (andar a ritmo rápido) durante 150 minutos a la semana es suficiente para disminuir el riesgo cardiovascular. Cada 1.500 pasos al día que se añadan, suponen una disminución del 15% en el riesgo de padecer enfermedad cardiovascular».

La receta para mantener una salud cardiovascular óptima es bien sencilla: actividad física regular, dieta saludable y moderada, y control del estrés. En cuanto a la dieta saludable, consumir una dieta rica en verduras, legumbres, frutas, granos integrales y con presencia de pescado, siguiendo el patrón de la dieta mediterránea, ayuda a mantener un peso saludable y controlar los niveles de colesterol. «El exceso de peso corporal contribuye a la aparición de otras patologías, como la hipertensión y la diabetes, aumentando así el riesgo cardiovascular. El 48% de la población tiene sobrepeso y un 15% de ella, obesidad».

Por último, para el control del estrés, existen técnicas como la meditación o el yoga que pueden ayudar a reducirlo. También se puede recurrir a una ayuda profesional, a través de profesionales de la psicología, expertos en este campo. El doctor Ortiz de Salazar también incide en evitar el tabaco, ya que «fumar es uno de los principales factores de riesgo modificables. El tabaco daña las paredes arteriales y acelera el proceso de aterosclerosis, que es la causa subyacente de muchas enfermedades cardiovasculares», zanja el especialista.

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