«Por el momento, las medidas aplicadas en Ordizia son proporcionadas»
«Ha sido una actuación relámpago, pionera, y el brote está en fase de control», asegura el epidemiólogo, que no se explica el escaso uso de las mascarillas
«Está tocando currar bastante». Es la salutación de Ignacio Garitano, epidemiólogo y responsable del Plan de Vigilacia y Control de la pandemia de Osakidetza. ... El verano no está resultando todo lo tranquilo que presumía hace un mes. Se confiaba en el efecto de unas condiciones climatológicas más adversas para la propagación del virus, pero no se esperaba que la responsabilidad individual de la población fuera tan quebradiza. Resultado: los «inevitables» brotes se suceden. El más grave hasta hoy en Ordizia, aunque «lo estamos controlando».
- ¿Nos hemos relajado?
- Sí, excesivamente.
- ¿Se esperaba una conciencia ciudadana mayor después de lo sufrido?
- Es un asunto de responsabilidad individual. Hay unas recomendaciones muy claras que machaconamente repiten las autoridades sanitarias... Si me preguntas si se han relajado, yo opino que sí, que mucho.
- ¿Preveían la posible aparición de un brote de las características del que se está produciendo en Ordizia?
- Bueno, la evolución natural de esta enfermedad es crear brotes. ¿De las dimensiones del de Ordizia? Si no se actúa de forma rápida, un brote avanza y se va transformando. Por eso se activan estos programas; es lo que se supone que sirve para cortar la transmisión del patógeno.
- ¿Está cerca de darse por controlado?
- Que un brote está bajo control solo se puede decir al final, cuando ya lo has cerrado. Pero, hoy por hoy, estamos satisfechos. Está en una fase de control.
- ¿Se podría haber evitado si la paciente cero que llegó de una zona de riesgo como Lleida se hubiera puesto la mascarilla durante la cena que propició el foco?
- Es muy difícil saberlo. Probablemente, la mascarilla haya hecho su función en el trayecto que realizó esta persona en un medio de transporte, pero si luego celebras un evento familiar o social en el cual te relajas, aumentas otra vez el peligro de contagio.
- ¿Son suficientes las medidas impuestas en Ordizia para frenar la propagación?
- Probablemente, sí.
- ¿No sería más efectivo un confinamiento selectivo, dado que se ha producido una transmisión comunitaria?
- Es un tema de proporcionalidad, y en este momento pensamos que las medidas más proporcionadas son las que hemos aplicado. Ha sido una actuación relámpago, y pionera. Estamos satisfechos del resultado hasta ahora.
- Parece repetirse el patrón del origen de los focos en Euskadi: infectados que han contraído la enfermedad fuera de la comunidad.
- Es una tendencia que estamos detectando. Cada vez hay más casos que tienen alguna relación con un viaje reciente. Sea a destinos internacionales o a otras provincias. Aquí la curva llegó a situarse en unos niveles bajísimos, pero, salvo algún día concreto, nunca hemos dejado de diagnosticar casos. El virus no se ha ido nunca de aquí.
- Buena parte de los contagios se detectan en jóvenes. ¿Cuál es la razón por la que los positivos en este colectivo representan un riesgo mayor?
- Es probable que las infecciones que se producen entre jóvenes se propaguen entre jóvenes. Ese colectivo ha tenido hasta ahora muy difícil relacionarse, pero las limitaciones han desaparecido. El riesgo es que se relacionan de una forma estrecha con más contactos que el resto, con lo que el virus se puede transmitir con mayor rapidez y la mayoría de ellos no tiene síntomas.
«Detectamos cada vez más casos importados. Pero hemos sumado positivos a diario, así que el virus nunca se ha ido de Euskadi»
registro
- La consejera de Salud también apuntó que estaban aumentando los casos entre niños.
- Al principio de la pandemia los niños casi no se testaban; apenas tenían síntomas y no se buscó la enfermedad entre ellos porque no fue un problema. Probablemente había casos, pero no teníamos constancia. Ahora, como ante cualquier síntoma recomendamos ir al pediatra, estamos encontrando alguno, pero son una minoría.
- ¿Cuál es la diferencia entre la aparición de un foco de transmisión comunitaria ahora o en el mes de marzo?
- En un foco como el de Ordizia, en marzo habríamos conocido muchos menos casos aunque estuvieran ahí. Los contactos habrían sido incalculables y el virus se extendería rápidamente.
- ¿Los ciudadanos pueden tener la seguridad de que la mayoría de contagios asociados a cada foco se identifican y controlan?
- Así es. Lo que esperamos que suceda es que los casos que suelen aparecer cuando se declara un foco de estas características afecten a personas que tienes ya controladas en sus casas, en aislamiento, y a los que se hace dos PCR durante el periodo de cuarentena. Que los nuevos casos se identifiquen en esos grupos de contactos es un buen síntoma, ya que se corta la cadena.
«Otoño queda muy lejos»
- En una entrevista hace escasamente un mes pronosticaba un verano tranquilo respecto a la evolución de la epidemia. ¿Hay que descartar que eso sea así?
- Yo creo que es una situación intermedia. Pensábamos que el virus no tenía condiciones propicias con el buen tiempo y el calor, pero parece que pesa más el hecho de que no estemos evitando situaciones que generan contactos prolongados y estrechos, como puede ser el ocio noctuno.
- Estamos viendo que son bares, restaurantes y locales de copas donde más se están produciendo los contagios. ¿Playas o paseos son espacios menos propicios para los brotes?
- Eso es proporcional a que sea un espacio reducido, cerrado... En el exterior hay muchas menos probabilidades de transmisión, pero un amontonamiento como se puede producir en una playa en hora punta también tiene su componente de peligro.
«Pensábamos que el clima frenaría la propagación, pero pesa más que no estemos evitando contactos prolongados y estrechos»
verano intranquilo
- ¿Es más factible que se origine un brote en una cena de diez personas en un bar sin las medidas de di stanciamiento que entre una multitud bebiendo en la calle?
- Las dos situaciones son de bastante riesgo.
- Pero, de momento, no se han conocido positivos derivados de las aglomeraciones acontecidas en Irun, Beasain o Vitoria.
- No, no ha surgido ningún brote. En este sentido, está bastante controlada la situación.
- ¿Ve apropiado que se declare el uso obligatorio de la mascarilla en todo momento en Euskadi?
- Todo lo que contribuya a evitar el contagio es efectivo, y el uso obligatorio de la mascarilla en todo momento podría serlo. Lamentablemente, somos uno de los territorios que menos la utiliza.
- ¿Le sorprende ese escaso uso?
- Busco explicación y no la encuentro. Probablemente tenga que ver con el estado actual de la pandemia en Euskadi, ya que somos una de las zonas en las que mejor estamos.
- ¿Qué perspectivas tienen sobre lo que pueda venir en otoño?
- Otoño queda muy lejos. No me planteo nada más allá de la semana que viene.
- Asusta un poco lo que dice. ¿Hay temor de no saber lo que puede pasar más allá de la próxima semana?
- Es un virus que se expande relativamente fácil y va a ser el control lo que determine cómo evolucionará la enfermedad. Partido a partido. Por eso estamos centrando todos los esfuerzos en el hoy.
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