El brote del gimnasio de Barakaldo asciende a 170 contagios por coronavirus
El brote detectado en un gimnasio de Barakaldo ha ido a más. Desde que fue detectado, Osakidetza ha contabilizado 170 contagios por coronavirus relacionados con este foco, que es de la cepa británica, mucho más contagiosa. La nueva cifra se ha dado a conocer en la rueda de prensa que han ofrecido este viernes José Luis Quintas y el subbdirector de Salud Pública y Adicciones, Koldo Cambra.
El viernes pasado se notificó que 62 personas se contagiaron en el gimnasio: 59 usuarios y 3 trabajadores. El resto de positivos, los 108 restantes, proceden de esta misma cepa, pero no fueron infectados en el propio centro. Se trata de contactos estrechos de los primeros, que fueron localizados a través de rastreos.
Este es uno de los focos que más preocupan en Euskadi por el alto número de contagios, que se ha disparado en los últimos días. Este martes, la firma Brooklyn Fitboxing International, bajo la que ha estado operando el centro deportivo de Barakaldo, anunció que había decidido retirar la franciquicia a la gerencia del local. La medida se ha adoptado «tras comprobar que no se cumplían correctamente los protocolos» dictados por la marca, así como los establecidos en el País Vasco, según advirtieron los responsables.
El centro llevaba abierto únicamente dos meses en el momento en el que se detectaron los primeros positivos. Tras confirmar que los trabajadores se habían infectado, los responsables decidieron cerrar el centro como medida preventiva. Se plantearon reabrir unos días más tarde, pero por el momento el gimnasio permanecerá clausurado.
La firma señaló que desde el 19 de febrero, cuando los responsables de Osakidetza les trasladaron el informe sobre los contagios, han recibido cerca de un centenar de correos electrónicos en los que distintos usuarios detallaban cómo se desarrollaban las clases y de qué manera se aplicaban los protocolos de seguridad. «Tras leer todos los emails, así como el informe que nos hizo llegar Salud del País Vasco, hemos comprobado que las medidas de seguridad en el centro se aplicaban de manera inconstante e irregular», aseveraron. Los portavoces de la firma detallaron que «muchos usuarios se bajaban la mascarilla para entrenar», pese a que es obligatorio usarla en los gimnasios vascos.
