«Las razones contra la maternidad subrogada resultan radicales y del todo irracionales»

– ¿De qué vamos a vivir los demás con tanto androide?

– Hay un movimiento interesante, aún minoritario, que dice que en el futuro no se necesitará trabajar. Tendremos que buscar otros sistemas que cubran nuestras necesidades económicas y sociales;y que no estén basados en la actividad laboral.

– ¿Tendremos cada uno nuestros robots que trabajen por nosotros?

– Será una especie de sociedad del ocio. En algunos países se han hecho experiencias de corto alcance, pero no se preocupe. Si alguna vez llega, tardará mucho en hacerlo.

– ¿De qué manera podemos proteger nuestros datos de todo tipo frente al control de las máquinas?

– Las tecnologías nos han ayudado mucho, son una gran ayuda, pero no podemos caer en el error de dejarnos dominar por sistemas inteligentes. 'Pues aquí dice que usted es de raza negra' '¡Que no hombre, míreme bien, que soy oriental!'. Suena a broma, pero existe ese riesgo.

– Si se roba información a los gobiernos o al Vaticano, entrar en Osakidetza será pan comido.

– ¡Pues claro! ¡Yen su móvil, aunque lo tenga apagado! Pero qué importa que se sepa si consumo muchas pizzas en esta empresa o la otra. El problema son las grandes empresas y entidades que quieren y pueden llegar a controlar nuestra vida y a obligarnos a tomar decisiones. ¡Yojo, que el sector público controla la vida de los ciudadanos!Y eso puede afectar directamente a nuestros derechos fundamentales.

– ¿Podrían modificar nuestro pensamiento político a través de las nuevas tecnologías?

– En eso estamos, aún en la Prehistoria, pero ése es el camino que hemos comenzado a andar. Amucha gente, sobre todo en una población como la nuestra, la tele le cansa y le cuesta leer periódicos. Es facilísimo bombardearte a mensajes de móvil que acabas creyéndote.

– Veo que las células madre ya no generan tanto conflicto ético.

– Hemos avanzado y han quedado atrás otros temas como la clonación humana, que tanto asustaban.

– Un científico chino ha anunciado que ha logrado modificar los genes de dos gemelos para que nazcan inmunes al VIH/sida.

– ¡A eso me refería! Parece una técnica inocua, que podría dar resultados, pero se ha hecho sin ningún tipo de control. Si se permite trabajar en estas condiciones, ¿qué puede pasarle a la especie humana?

– Pues posiblemente haya ya algún equipo dispuesto a hacerlo con todo el amparo de la ley.

– Probablemente. Cuando se inventó el cuchillo de cocina, hace miles de años, la gente pensaba que se utilizaría para cortar carne, pero se acabó usando para matar a las personas. El problema no es la tecnología, sino si van a funcionar los mecanismos de control. En Internet, según donde compre, pueden vaciarle la cuenta corriente en sólo tres minutos.

– Pero la idea de que nazcan bebés sanos parece fantástica.

– No hay nadie completamente sano. El prototipo de ser humano sano no existe. Por mucho que se manipulen genes, no se logrará que nazca un bebé inmune a la enfermedad. ¡Ojalá nuestro sistema de defensas fuera tan fuerte como para resistir cualquier agente patógeno! Pero aún así, uno puede medir 1,50 y eso le generaría problemas.

– Si fuera posible cambiar los genes de un bebé para evitar que nazca un psicópata, no estaría mal.

– Tendríamos que preguntarnos si conocemos los genes de la psicopatía. Se conocen algunos ligados a enfermedades mentales, pero no todos ni en todos los casos. En todas estas patologías no solo influyen los genes, sino también el ambiente en que se desenvuelve la persona.

– Usted hizo un voto particular en el informe del Comité Nacional de Bioética sobre maternidad subrogada, los llamados en otro tiempo 'vientres de alquiler'. ¿Qué le parece la posición en contra de la Organización Médica Colegial?

– La Sociedad Española de Fertilidad, de la que forman parte ginecólogos y especialistas en reproducción asistida, estableció una serie de criterios que debían seguirse en caso de que se regulara. No se pronunciaban a favor o en contra, pero fijar criterios previos ya es una actitud, cuando menos, tolerante.

– ¿Quiere decir que entre los médicos hay todo tipo de opiniones?

– La OMC tiene un Comité de Deontología y Ética que ellos sabrán lo que dicen, pero no creo que represente más que al propio comité, no a los médicos. Es más, estoy seguro de que en el sector privado hay un número elevado de facultativos que se pronunciaría a favor.

– Las familias estiman que unos 50 niños nacen cada año en Euskadi de forma subrogada y se quedan en un limbo legal.

– No creo que sean tantos. Éste no es un tema de ideología política, ni de izquierdas ni de derechas. En ésta, como en toda cuestión, no todo es blanco o negro. En cualquier situación, es muy fácil poner la mano bajo la mesa y coger el dinero. Pero si se regula, las cosas se facilitan. Los argumentos en contra me parecen radicales, totalmente irracionales.