Una lacra que afecta a muchos territorios

En 2016 saltó a la escena pública otro presunto escándalo de prostitución de menores tutelados. Fue en Álava. La Fiscalía pide hasta 214 años de cárcel para diez adultos procesados por contratar supuestamente los servicios sexuales de siete internos en el centro foral Sansoheta, rebautizado ahora como Centro Educativo Terapéutico Gasteiz. Todos los acusados son varones y con vidas aparentemente convencionales. El juicio tiene previsto arrancar «en abril o mayo».

El caso se destapó tras la Nochebuena de 2019, con la captura de los supuestos autores de la violación grupal de una menor tutelada de 13 años en Mallorca. Poco después se produjeron otros diecisiete arrestos, que se llevaron a cabo en dos fases. La primera acabó con la detención de tres menores de edad acusadas de captar a otras adolescentes para que fueran explotadas sexualmente. La continuación de la operación concluyó con la identificación de otros catorce sospechosos, diez hombres y cuatro mujeres de edades comprendidas entre 21 y 65 años, acusados de contactar con menores a través de páginas web de adultos para proponerles mantener relaciones sexuales a cambio de dinero. Muchas de estas personas terminaron siendo puestas en libertad en el curso de la investigación.

Como ocurre en la gran mayoría de estos casos, los agresores se valían de la vulnerabilidad de las chicas para torcer su voluntad, para hacerlas creer que, en realidad, fue decisión suya adentrarse en el infierno en el que acabaron viviendo. Ocurrió en Madrid. Primero fueron tentadas con drogas. Después, una vez enganchadas, les obligaban a prostituirse si querían seguir consumiendo. La Policía cuenta unas diez víctimas entre 2020 y 2021. Cuando se escapaban de los centros de régimen abierto, iban al poblado de San Dalmacio, en el distrito madrileño de Villaverde, derruido en septiembre y puesto en pie otra vez poco después. Allí se sometían sexualmente a cambio de sustancias estupefacientes. Una de ellas fue descubierta durmiendo en el exterior de una chabola. Otra fue violada tras ser retenida durante varios días en una casa. Los investigadores de la trama centraron sus pesquisas en el 'Kalifa', el hombre que, supuestamente, dirigía esta red de prostitución. Varias adolescentes confesaron que estaban «enamoradas» de él.

Los abusos sexuales a menores tutelados en Valencia se han convertido en una de las principales armas de la batalla política en Valencia. El PP habla de 175 víctimas atendidas entre 2020 y 2021. La Generalitat minimiza la dimensión del suceso y dice que en esa cifra se incluyen «todo tipo de casos». Mantiene que la mayoría de esos menores no estaban tutelados cuando supuestamente tuvieron lugar las agresiones.