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Martes, 27 de diciembre 2022, 17:59

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Ford Scort RS Cosworth

museo nacional del automóvil
Ford Scort RS Cosworth
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Mini Cooper S. El primer vehículo que se encuentra el visitante en la exposición ‘The golden age of rally’ del Museo Nacional del Automóvil de Turín es un ejemplar del Mini Cooper S que participó en el rally de Montecarlo de 1966 y ganó al año siguiente el de 1.000 Lagos en Finlandia con Tommi Mäkinen al volante. Fue una victoria memorable porque al coche se le rompieron las correas de retención del capó, que se levantaba y tapaba la luna, por lo que Mäkinen, con la asistencia de su compatriota Pekka Keskitalo como copiloto, tuvo que hacer parte de la carrera mirando por las ventanillas laterales.

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Mini Cooper S. El primer vehículo que se encuentra el visitante en la exposición ‘The golden age of rally’ del Museo Nacional del Automóvil de Turín es un ejemplar del Mini Cooper S que participó en el rally de Montecarlo de 1966 y ganó al año siguiente el de 1.000 Lagos en Finlandia con Tommi Mäkinen al volante. Fue una victoria memorable porque al coche se le rompieron las correas de retención del capó, que se levantaba y tapaba la luna, por lo que Mäkinen, con la asistencia de su compatriota Pekka Keskitalo como copiloto, tuvo que hacer parte de la carrera mirando por las ventanillas laterales.
Mini Cooper S. El primer vehículo que se encuentra el visitante en la exposición ‘The golden age of rally’ del Museo Nacional del Automóvil de Turín es un ejemplar del Mini Cooper S que participó en el rally de Montecarlo de 1966 y ganó al año siguiente el de 1.000 Lagos en Finlandia con Tommi Mäkinen al volante. Fue una victoria memorable porque al coche se le rompieron las correas de retención del capó, que se levantaba y tapaba la luna, por lo que Mäkinen, con la asistencia de su compatriota Pekka Keskitalo como copiloto, tuvo que hacer parte de la carrera mirando por las ventanillas laterales.

Alpine Renault A110 1800. Con este coche la pareja francesa formada por Bernard Darniche y Alain Mahé ganó el Rally de Marruecos en 1973, que incluía etapas en el desierto del Sáhara tan duras que provocaron que sólo 12 de los 72 participantes completaran la carrera. Tras algunos éxitos aislados anteriores, aquel año fue el de despegue de la marca gala, que logró la victoria en el Campeonato Mundial de Constructores gracias a los triunfos en Montecarlo, Portugal, Sanremo, Córcega y al citado en Marruecos.

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Alpine Renault A110 1800. Con este coche la pareja francesa formada por Bernard Darniche y Alain Mahé ganó el Rally de Marruecos en 1973, que incluía etapas en el desierto del Sáhara tan duras que provocaron que sólo 12 de los 72 participantes completaran la carrera. Tras algunos éxitos aislados anteriores, aquel año fue el de despegue de la marca gala, que logró la victoria en el Campeonato Mundial de Constructores gracias a los triunfos en Montecarlo, Portugal, Sanremo, Córcega y al citado en Marruecos.
Alpine Renault A110 1800. Con este coche la pareja francesa formada por Bernard Darniche y Alain Mahé ganó el Rally de Marruecos en 1973, que incluía etapas en el desierto del Sáhara tan duras que provocaron que sólo 12 de los 72 participantes completaran la carrera. Tras algunos éxitos aislados anteriores, aquel año fue el de despegue de la marca gala, que logró la victoria en el Campeonato Mundial de Constructores gracias a los triunfos en Montecarlo, Portugal, Sanremo, Córcega y al citado en Marruecos.

Porche 911 S Coupé

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Porche 911 S Coupé
Porche 911 S Coupé

Lancia Stratos. Este vehículo de diseño vanguardista considerado un icono para los aficionados del automovilismo fue el primer coche proyectado de manera específica para los rallies. Con numerosísimas victorias en multitud de carreras desde su debut en 1976, el Stratos presente en la exposición sufrió diversos cambios tanto en su motor como en sus colores externos, al cambiar el patrocinio del equipo de Marlboro a Alitalia. Entre los pilotos que se pusieron a sus mandos destacan los italianos Raffaele Pinto y Sandro Munari.

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Lancia Stratos. Este vehículo de diseño vanguardista considerado un icono para los aficionados del automovilismo fue el primer coche proyectado de manera específica para los rallies. Con numerosísimas victorias en multitud de carreras desde su debut en 1976, el Stratos presente en la exposición sufrió diversos cambios tanto en su motor como en sus colores externos, al cambiar el patrocinio del equipo de Marlboro a Alitalia. Entre los pilotos que se pusieron a sus mandos destacan los italianos Raffaele Pinto y Sandro Munari.
Lancia Stratos. Este vehículo de diseño vanguardista considerado un icono para los aficionados del automovilismo fue el primer coche proyectado de manera específica para los rallies. Con numerosísimas victorias en multitud de carreras desde su debut en 1976, el Stratos presente en la exposición sufrió diversos cambios tanto en su motor como en sus colores externos, al cambiar el patrocinio del equipo de Marlboro a Alitalia. Entre los pilotos que se pusieron a sus mandos destacan los italianos Raffaele Pinto y Sandro Munari.

Renault 5 Turbo

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Renault 5 Turbo
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Toyota Celica GT-4. La marca japonesa alcanzó el éxito en 1990 con este vehículo pilotado por la pareja española formada por Carlos Sainz como piloto y Luis Moya como copiloto, que irrumpieron con fuerza en el mundo de los rallies dándole la vuelta a los equilibrios existentes hasta entonces, con dominio de los constructores europeos y de pilotos como el italiano Miki Biasion y el finlandés Juha Kankkunen. Al volante de este mítico Celica, Sainz ganó los rallies de 1.000 Lagos y de Gran Bretaña, hasta entonces dominados siempre por pilotos del norte de Europa.

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Toyota Celica GT-4. La marca japonesa alcanzó el éxito en 1990 con este vehículo pilotado por la pareja española formada por Carlos Sainz como piloto y Luis Moya como copiloto, que irrumpieron con fuerza en el mundo de los rallies dándole la vuelta a los equilibrios existentes hasta entonces, con dominio de los constructores europeos y de pilotos como el italiano Miki Biasion y el finlandés Juha Kankkunen. Al volante de este mítico Celica, Sainz ganó los rallies de 1.000 Lagos y de Gran Bretaña, hasta entonces dominados siempre por pilotos del norte de Europa.
Toyota Celica GT-4. La marca japonesa alcanzó el éxito en 1990 con este vehículo pilotado por la pareja española formada por Carlos Sainz como piloto y Luis Moya como copiloto, que irrumpieron con fuerza en el mundo de los rallies dándole la vuelta a los equilibrios existentes hasta entonces, con dominio de los constructores europeos y de pilotos como el italiano Miki Biasion y el finlandés Juha Kankkunen. Al volante de este mítico Celica, Sainz ganó los rallies de 1.000 Lagos y de Gran Bretaña, hasta entonces dominados siempre por pilotos del norte de Europa.

Lancia Delta HF Integrale Evoluzione Safari. El fabricante italiano logró el campeonato mundial de rallies en 1992 con este automóvil que conducía Juha Kankkunen con Juha Piironen como copiloto. Este automóvil se conserva en su estado original, a excepción del techo, que tuvo que ser sustituido debido a un accidente. Entre sus peculiaridades destacan la estructura metálica añadida en la parte frontal para mejorar la resistencia frente a posibles choques con animales salvajes, los potentísimos faros para garantizar la visibilidad en medio del polvo y la dotación de un machete para abrirse paso por las junglas africanas.

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Lancia Delta HF Integrale Evoluzione Safari. El fabricante italiano logró el campeonato mundial de rallies en 1992 con este automóvil que conducía Juha Kankkunen con Juha Piironen como copiloto. Este automóvil se conserva en su estado original, a excepción del techo, que tuvo que ser sustituido debido a un accidente. Entre sus peculiaridades destacan la estructura metálica añadida en la parte frontal para mejorar la resistencia frente a posibles choques con animales salvajes, los potentísimos faros para garantizar la visibilidad en medio del polvo y la dotación de un machete para abrirse paso por las junglas africanas.
Lancia Delta HF Integrale Evoluzione Safari. El fabricante italiano logró el campeonato mundial de rallies en 1992 con este automóvil que conducía Juha Kankkunen con Juha Piironen como copiloto. Este automóvil se conserva en su estado original, a excepción del techo, que tuvo que ser sustituido debido a un accidente. Entre sus peculiaridades destacan la estructura metálica añadida en la parte frontal para mejorar la resistencia frente a posibles choques con animales salvajes, los potentísimos faros para garantizar la visibilidad en medio del polvo y la dotación de un machete para abrirse paso por las junglas africanas.

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