La reforma de Celaá solo permitirá superar Bachillerato con un suspenso en excepciones
El anteproyecto de ley prevé implantar dos asignaturas de Filosofía como materia obligatoria en los dos cursos de Bachillerato de cara al curso 2020-2021
La reforma de la Lomce que la ministra de Educación, Isabel Celaá, está a punto de llevar al Consejo de Ministros confirma la ... posibilidad de que los alumnos de Bachillerato puedan obtener el título hasta con una asignatura suspensa, pero especifica que no será algo que el estudiante logre de forma automática y generalizada, sino más bien todo lo contrario: será una medida «excepcional». El borrador de propuestas para la reforma que el Gobierno hizo llegar hace dos semanas a los agentes sociales enunciaba esta posibilidad sin realizar más matizaciones, pero el anteproyecto de ley, ya con texto articulado y 69 páginas, establece claras limitaciones.
La reforma que Celaá quiere mandar al Congreso para su tramitación en enero indica que para lograr el título de Bachillerato es necesario, como en la actualidad, tener aprobadas las asignaturas de los dos cursos. Esa es la regla general. No obstante, la nueva ley también permitiría, «excepcionalmente», que el equipo docente pueda decidir que un alumno con una asignatura suspensa logre el Bachillerato «siempre que se considere que ha alcanzado los objetivos vínculados a ese título». Y tampoco podrá será una decisión aleatoria. «El Gobierno -dice el anteproyecto-, oídas las comunidades autónomas, establecerá las condiciones y procedimientos» para que se pueda producir este hecho «excepcional». Eso sí, si la reforma se convierte en ley, está posibilidad quedaría ya abierta desde el próximo curso.
Se suprime el artículo que permitía que Religión computara para la nota media del alumno
El anteproyecto, que prevé modificar o sustituir hasta 84 aspectos de la actual ley educativa, introduce varias novedades sobre las varias decenas de reformas ya divulgadas por el ministerio. Entre ellas está la intención, si el Parlamento termina por aprobar esta reforma, de implantar de forma obligatoria la materia de Filosofía en los dos cursos de Bachillerato, asunto apoyado por todo los partidos políticos.
El texto indica que tanto Filosofía (en primero) como Historia de la Filosofía (en segundo) se convertirán en «materias comunes», por lo que serán ofertadas en todos los centros y cursadas por todos los alumnos con independencia de su especialidad. Es decir, serán obligatorias. La norma prevé que su implantación en primer año sería en el curso 2020-21 y que se implantaría en segundo en el 2021-22.
Lenguas cooficiales
La reforma con la que Celaá quiere derogar algunos de los aspectos más polémicos de la llamada 'ley Wert' prevé convertir de nuevo la asignatura de Religión en voluntaria, ya que el alumno que no la pida no deberá cursar alternativa alguna y, además, carecerá de todo valor académico ni contará para la nota media o las becas. En Primaría y ESO los centros educativos, no obstante, tendrán que ofertarla siempre. No ocurre así, según el borrador, con los centros de Bachillerato, donde perderá la categoría de materia específica que le dio Wert y será solo una optativa si así lo deciden las comunidades autónomas.
El proyecto también contempla que los alumnos de Formación Profesional Básica, si superan este ciclo, obtengan al tiempo el título en ESO, lo que les permitiría continuar sus estudios en FP media, pero también acceder al Bachillerato.
El borrador, que fue presentado ayer a los integrantes del Consejo Escolar del Estado, incluye la posibilidad de que las comunidades autónomas decidan el uso del castellano y otras lenguas cooficiales como «lengua vehicular», con el objetivo de que los alumnos sepan expresarse y comprender ambas lenguas al finalizar la educación obligatoria.
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