La comunidad educativa de Hijas de la Cruz presenta una propuesta para hacer público el centro
Han entregado su iniciativa a los partidos con representación en la Corporación para que se vote en el Pleno del Ayuntamiento de Bilbao
Profesores, trabajadores y familias del colegio Hijas de la Cruz se resisten a tirar la toalla ante el cierre del colegio el próximo curso y buscan el respaldo del Ayuntamiento de Bilbao para evitar su desaparición. La comunidad educativa presentó este jueves a los partidos con representación en la Corporación bilbaína una propuesta de moción en la que piden la publificación del colegio concertado para que se debata en próximo Pleno.
En la iniciativa solicitan al Ayuntamiento que inste al Departamento de Educación para «que actúe con valentía y determinación, e inicie el proceso integral dirigido a hacer público el centro y le dote de los recursos necesarios con el fin de convertirlo en un proyecto educativo atractivo». El centro cuenta con una mayoría de sus escolares inmigrantes y una parte de sus alumnos tiene necesidades educativas especiales por lo que los docentes han resaltado en numerosas ocasiones «la labor social» que cumplía el colegio.
Edificio para fines educativos
El cierre llevará a familias que viven en el Casco Viejo de Bilbao y Solokoetxe a estudiar fuera de su barrio. Además, esta decisión «dejará a la zona sin más de 300 plazas escolares», explicaron este jueves. Argumentan que la oferta pública actual del distrito «es muy reducida», ya que las escuelas de Mujika y Atxuri «están llenas y con falta de espacio».
«Ante la gravedad de la situación que se abre para las familias y trabajadores, así como para el mapa escolar de la zona, la comunidad educativa de Hijas de la Cruz ha propuesto que el Pleno del Ayuntamiento de Bilbao que tendrá lugar el próximo 25 de marzo acepte la moción», piden. Durante la mañana de este jueves, los representantes de las plantillas y las familias se entrevistaron con los diferentes grupos políticos y les entregaron la propuesta que quieren que se apruebe en el Pleno de 25 de marzo.
La congregación religiosa propietaria del colegio anunció en enero que el 31 de agosto de 2021 cerrarán el centro, tras 162 años de actividad con el argumento de que la matriculación ha descendido y se habían perdido dos conciertos educativos. Las más de 200 familias del centro han tenido que buscar un plaza en colegios de la zona, mientras que la plantilla de 41 trabajadores se quedará en la calle.
El Ayuntamiento de Bilbao ha informado a los trabajadores de que el terreno y el edificio de Hijas de la Cruz de Santutxu «no podrá ser utilizado para otro fin que el educativo». Por ello, consideran que una de las salidas viables es la publificación del colegio. «El Ayuntamiento también tiene obligación de garantizar la oferta suficiente de plazas escolares públicas en el barrio», incidieron.