Los colegios medirán la destreza digital de los alumnos en pleno debate sobre las pantallas
El informe PISA evaluará en 2025 por primera vez el grado de aprendizaje tecnológico y el dominio del inglés de los alumnos de cuarto curso de la ESO
Los alumnos vascos nacidos en 2009 que cursan ahora 4º de la ESO se enfrentarán esta próxima primavera a una nueva edición del examen PISA, ... una prueba organizada por la OCDE y de reconocido prestigio mundial -participan más de 80 países- que mide las aptitudes, sobre todo prácticas, de los adolescentes en tres competencias: Ciencias, Lectura y Matemáticas.
El examen, de sobra conocido en la comunidad educativa, adquirió una trascendencia mucho mayor hace justo un año, cuando se publicaron los resultados de la evaluación realizada en 2022. Euskadi sufrió un sonado descalabro que le situó como una de las comunidades autónomas con peores resultados a nivel estatal. Con los ecos de este siniestro académico aún resonando en los despachos del Departamento vasco de Educación, las nuevas evaluaciones de 2025 ya están en el horno y los profesores empezarán a recibir la formación específica para este prueba una vez vuelvan de sus vacaciones navideñas, el próximo día 7, tal y como informa el Instituto Vasco de Evaluación e Investigación Educativa en un documento oficial recientemente publicado. Esta entidad, el ISEI-IVEI, es la encargada de adaptar los materiales de PISA tanto para los docentes vascos como para los alumnos.
El examen, además, viene este año con dos novedades importantes. Los alumnos tendrán que demostrar su nivel de conocimiento «práctico y competencial» en la asignatura de Inglés y en la de Aprendizaje en el Mundo Digital. En esta última se medirá su capacidad «para resolver problemas a través de medios digitales y conocer su grado de autorregulación del aprendizaje», explican.
Euskadi es la única comunidad a nivel estatal que aún no ha legislado el uso del móvil en las aulas
La inclusión de esta materia llega en un momento en el que la digitalización de las aulas está en el punto de mira de miles de familias vascas. La negativa del Ejecutivo autonómico a legislar sobre la libertad de los menores de llevar -o no- móviles inteligentes a los colegios ha generado una fuerte polémica en Euskadi en los últimos años, ya que es la única comunidad a nivel estatal que aún no ha elaborado ninguna ley al respecto.
A través de esta evaluación internacional en la que participan miles de estudiantes de todo el mundo se pretende alcanzar un objetivo: reducir al 15% el porcentaje de alumnado en nivel de rendimiento bajo. En Euskadi se han aplicado en los últimos cursos varios programas destinados a reforzar las competencias de los alumnos en las materias troncales de este examen: Ciencias, Lectura (Elibrum) y Matemáticas (Eskola adimentsua).
«Refuerzo de competencias»
La consejera de Educación, Begoña Pedrosa, señaló en el Parlamento vasco en agosto que el Departamento de Educación está «adoptando las medidas necesarias para el desarrollo de todas las competencias del currículum con carácter general y el refuerzo de las competencias que mide PISA en particular». Recalcó, además, que «así aseguramos que las acciones y procesos educativos estén orientados hacia el cumplimiento de los estándares internacionales de evaluación y de lo establecido en la normativa educativa propia».
Los estudiantes vascos de 4º de ESO -tomaron parte 3.352 alumnos de Euskadi hace dos años- tendrán dos horas para realizar las pruebas competenciales y una hora y cuarto para completar un cuestionario. Para comprender mejor qué tipo de prueba van a encarar los adolescentes vascos, el ISEI-IVEI ha preparado una guía con ejemplos prácticos de preguntas, pero lo ha hecho solo para las pruebas ya conocidas, que son las de Ciencia, Lectura y Matemáticas. Las nuevas, Aprendizaje en el Mundo Digital e Inglés, no están adaptadas para la comunidad educativa vasca, pero sí se pueden consultar en el sitio web de la OCDE (oecd.org).
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