Menos alumnos por aula en una vuelta a clase que iniciaría segundo de Bachiller

Este retorno por etapas dejaría espacio suficiente en los centros para dividir cada clase de Bachillerato -que puede tener hasta una treintena de alumnos- en dos o más grupos, con el fin de minimizar riesgos. Es una medida que ya ha anunciado el Gobierno alemán, que limitará a quince el máximo de estudiantes en cada aula.

Cuarto de Secundaria tendrá también prioridad si se abren los colegios antes de acabar el curso. Los chavales de esa etapa se juegan mucho, ya que tienen que conseguir el título de ESO para poder acceder a la Formación Profesional o el Bachillerato y continuar su recorrido académico. Al igual que sus compañeros del ciclo previo a la universidad, regresarían a centros casi vacíos en los que podrían repartirse por varias clases.

La incorporación del resto de escolares vascos al sistema educativo dependerá de la fecha en que se autorice la enseñanza presencial. Si el Ministerio de Sanidad decide abrir los colegios en la primera quincena de mayo, habría margen suficiente para que los tres primeros cursos de ESO - de 13 a 15 años- e incluso Primaria -6 a 12 años- pudieran volver a las aulas aunque por un período corto, de dos o tres semanas.

En el caso de que los colegios permanezcan cerrados hasta junio, los escolares de Primaria acabarían casi con toda probabilidad el curso vía telemática desde casa. Los pequeños de Infantil, con más riesgo de contagios por su corta edad, tienen prácticamente descartado su retorno a escuelas y guarderías.

Los responsables de la enseñanza en Euskadi consideran que hay menos problema con que Primaria finalice el curso a distancia, dado que en esa etapa «se da prioridad a la evaluación continua» y no otorga un título. Sin embargo, en segundo de Bachillerato tienen un peso mayor los exámenes para calificar al estudiante con una nota que hace media con la Selectividad y es clave en el acceso a grados universitarios.

El Departamento que dirige Cristina Uriarte prepara desde hace tiempo el plan de regreso escalonado a las aulas y en diferentes escenarios. Una vez que Sanidad determine la fecha, el Gobierno vasco fijará las pautas para Euskadi. Educación ya ha dejado claro que rechaza medidas unificadas para todas las comunidades. El Ministerio que dirige Isabel Celaá quiere lograr «el mayor consenso posible» sobre un acuerdo marco que «establezca unos principios mínimos y flexibles» que cada autonomía pueda adaptar a sus especificidades.