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Martes, 13 de noviembre 2018, 13:04
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En un intento por controlar el fenómeno de los pisos turísticos y atajar el fraude, la Diputación de Bizkaia ha dado un nuevo paso: exigir a inmobiliarias y plataformas digitales que informen a la Hacienda foral de los arrendadores de pisos, de las habitaciones y de los ingresos que han percibido.
Así, el nuevo decreto foral obliga a los intermediarios en el alquiler de vividas turísticas, incluidas las redes digitales, a identificar a los propietarios y las viviendas e informar de las fechas del alquiler y de las cantidades percibidas. Esta medida pretende, según el diputado foral, José María Iruarrizaga, controlar el fraude fiscal en un sector que está en auge. Hasta ahora, los que estaban obligados a declarar la actividad eran únicamente los arrendadores de las viviendas, pero la Hacienda vizcaína ha detectado entre 2014 y 2016 a 110 contribuyentes que no lo han hecho, expedientes que se saldaron con 45 regularizaciones por valor de 66.251 euros.
Los ingresos por el alquiler de viviendas turísticas tributan en el IRPF en el caso de los particulares y mediante el Impuesto de Sociedades si son personas jurídicas o empresas.
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