Una denuncia en Euskadi posibilita una detención en Toledo por pornografía infantil y agresión sexual a menores

La investigación se remonta al pasado mes de marzo cuando la Ertzaintza intervino en un caso de tenencia de material de abuso infantil en Gipuzkoa. Tras meses de investigación, agentes de la Jefatura de Investigación Criminal y Policía Judicial de la policía autónoma se trasladaron a Zaragoza donde, junto a miembros del Cuerpo Nacional de Policía de esta ciudad, realizaron el operativo conjunto denominado «Zutabe / Urtzi» que se saldó con la detención de otro individuo como presunto responsable de los delitos de tenencia, producción y distribución de pornografía infantil, «grooming» (acoso y captación de menores a través de medios digitales), agresión sexual a menor, exhibicionismo y provocación sexual y con la intervención en el registro de su domicilio de gran cantidad de material de abuso sexual infantil. Se comprobó igualmente la intensa actividad del autor de los hechos en grupos y canales de carácter pedófilo donde obtenía y compartía dicho material.

El análisis de esas comunicaciones permitió localizar a un usuario que había solicitado a otro imágenes y vídeos de agresiones sexuales a una niña de 7 años y a su vez le había compartido fotografías y vídeos similares, así como de multitud de niñas con las que contactaba por diversas aplicaciones utilizadas por menores. Los agentes confirmaron además que se trataba de un individuo «muy activo en la búsqueda de menores por la red para obtener material gráfico de carácter sexual de niñas de corta edad». Dado que se encontraba «en período de transición a la agresión sexual real», los investigadores «trabajaron intensamente para su completa identificación y localización».

Fue encontrado en una localidad toledana hasta la que se desplazaron los efectivos de la Ertzaintza, en colaboración con la Policía Nacional de la provincia castellano-manchega. Una vez allí se procedió a la detención, entrada y registro del domicilio del varón. En el marco de la operación, «se intervinieron numerosas cuentas de correo electrónico y perfiles de redes sociales utilizados para su actividad delictiva, así como gran cantidad de material de abuso sexual de menores; estimándose de su análisis preliminar un elevado número de víctimas».

«El detenido utilizaba diversas medidas de seguridad, como un terminal telefónico de uso exclusivo para su actividad, así como canales de comunicación considerados seguros para evitar la detección policial», detalla el comunicado oficial de la Ertzaintza. Una vez instruido el correspondiente Atestado policial, el detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Illescas (Toledo), que ordenó su inmediato ingreso en prisión preventiva.