El auge de los caterings a domicilio en Bizkaia: cuando la cocina es una carga
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Esto servicio crece entre mayores y dependientes, un modelo basado en facilitar opciones nutricionales accesibles y personalizadasEn Bizkaia cada vez son más las personas mayores que recurren a los servicios de comida a domicilio, evidenciando la necesidad de buscar alternativas que ... faciliten su día a día. Esta tendencia refleja la importancia de ofrecer opciones nutricionales accesibles y personalizadas, que no solo aseguran una alimentación saludable, sino que también promueven la autonomía y el bienestar de quienes desean permanecer en sus hogares el mayor tiempo posible.
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Desde que en 2008 Etxejan se presentó en la capital vizcaína como el primer servicio de comida a viviendas particulares diseñado específicamente para la tercera edad y dependientes, muchas cosas han cambiado, pero el espíritu que guía este modelo sigue siendo el mismo. Lanzado por Lantegi Batuak en colaboración con Iruña Catering, la idea nació de la creciente necesidad social de garantizar un acceso adecuado a comidas orientadas a sectores vulnerables de la población.
Iker Villanueva, de la dirección de servicios generales de Lantegi Batuak, señala que Etxejan actualmente llega todas las semanas a 200 personas distribuidas por toda Bizkaia, desde Bilbao, Barakaldo o Getxo hasta Mungia, Gernika, Durango o Arrigorriaga. «Por densidad, el mayor solicitante es el Gran Bilbao», explica Villanueva. Además, se han establecido licitaciones con los ayuntamientos de Berriz y Ermua, reflejando la creciente confianza en el programa, que anualmente distribuye cerca de 150.000 encargos.
Los menús que ofrece este servicio han sido diseñados por un departamento de nutrición que alterna los diferentes grupos de alimentos apostando «por la variedad con rotaciones de seis semanas, con el fin de lograr una dieta equilibrada y acorde a las necesidades de los usuarios». Los pedidos son flexibles, ya que se pueden pedir para días aislados o semanas completas que incluyan el almuerzo y la cena o solo una de las dos comidas.
Para la distribución de los alimentos al hogar, que se realiza una vez por semana, utilizan un vehículo isotermo que permite ajustar en cada fase del transporte las condiciones higiénicas y la temperatura adecuada con la finalidad de asegurar la entrega de los mismos en condiciones óptimas. Cada una de las entregas realizadas debe ser verificada de manera cuantitativa y cualitativa. Se establecen los siguientes parámetros de control: cantidad, etiquetado, caducidad y peso.
«Contratan los familiares»
La empresa Sukalde Catering de Santurtzi desempeña una labor similar. Su campo de acción abarca también el Gran Bilbao. «Antes cubríamos toda Bizkaia, pero hemos reducido el ámbito de actuación con el propósito de atender mejor a nuestros usuarios», explica Sarai Ramos, representante de la entidad. Abrieron en 1987 y durante estos últimos casi cuarenta años se han dedicado a ofrecer comidas a los hogares, destacando el centro de Bilbao, Barakaldo y la Zona Minera por número de consumidores. «Entregamos alrededor de 1.000 menús del día», detalla. Respecto al perfil de los solicitantes, un 60% son hombres y un 40% mujeres.
Ramos destaca el aumento que ha experimentado la demanda tras la pandemia de Covid-19. «Durante ese periodo, recibimos muchas llamadas de familias que tenían un ser querido solo en casa, incapaz de asistir a un centro de día o de preparar la comida», recuerda. «Y muchos de esos nuevos usuarios han seguido confiando en nosotros, lo que nos hace sentir muy agradecidos». Asegura, además, que el boca a boca es fundamental para afianzarse en el mercado.
La mayoría de las solicitudes -«un 90% de los casos»- provienen de familiares cercanos. «Normalmente son ellos los que contactan con nosotros, aunque a la hora de seleccionar los menús sean, lógicamente, los propios clientes los que llaman con el fin de hacer ajustes», explica Ramos. Ofrecen un paquete semanal que incluye seis primeros platos, seis segundos y cuatro postres, permitiendo a los beneficiarios organizarse sin la presión de esperar un reparto diario. «Esto les ayuda a administrar mejor su tiempo y no estar pendientes de cuándo llegamos», ha subrayado.
En Sukalde Catering son fieles a sus principios. Mantienen las recetas con las que comenzaron, aunque las mejoran y adaptan según lo requiera la ocasión. Asimismo, utilizan ingredientes de kilómetro cero y seleccionan a sus proveedores. A pesar de que sus menús pueden tener un coste más elevado que los de otras empresas -rondan los 12 euros-, Sarai destaca que la cantidad y calidad de los platos justifican la inversión. «Muchos nos dicen que con un mismo menú son capaces de comer y cenar», afirma. La compañía se esfuerza por ofrecer «una alimentación adecuada y casera, que combine calidad, comodidad y un toque familiar».
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