Cada vasco tira más de 75 kilos de comida a la basura al año
El Ejecutivo autonómico inicia una campaña para reducir el despilfarro alimenticio en los hogares por su alto impacto ambiental
Mientras el 10% de la población mundial no come lo suficiente, al menos uno de cada cinco kilos de comida se desperdicia en Europa lo largo de las distintas fases de la cadena alimentaria. España es el séptimo país de la Unión que más desecha: 7,7 millones de toneladas cada año. El Gobierno vasco cree que la cantidad en Euskadi es similar, unos 179 kilos per cápita. Pero en las propias casas es donde más se desperdicia, cerca del 42% del total. Es decir, cada vasco tira anualmente 75,2 kilos de comida al cubo de la basura porque se pone mala, porque cocina demasiada cantidad... «Son datos preocupantes», aseguró este martes Bittor Oroz, viceconsejero de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria, que depende del Departamento de Sostenibilidad del Gabinete.
Publicidad
«No solo estamos produciendo basura innecesaria, también estamos consumiendo recursos en balde -advirtió-. La producción de alimentos supone el 70% del agua que se gasta y el 17% de la emisión de gases de efecto invernadero». En otras palabras: tirar comida implica además desperdiciar el pienso que ha ingerido el ganado sacrificado, el agua que ha consumido, la energía y el combustible invertidos en la cría y portes...
Para concienciar a la población acerca de este derroche, el Ejecutivo ha puesto en marcha hasta el 20 de diciembre la campaña 'La comida no se tira' en las tres capitales vascas. Entre las acciones que recomienda, planificar los menús para no comprar más de lo necesario, preservar la cadena de frío para que no se echen a perder los alimentos, evitar cocinar demasiado o hacer otras recetas con las sobras.
La directora de la Fundación pública Elika, Arantza Madariaga, explicó ayer los primeros resultados del estudio que realizan en colaboración con otros centros, como Azti, para examinar cuánto se malgasta a lo largo de todo el proceso de producción, manipulación, venta y consumo y establecer estrategias que ayuden a poner freno al despilfarro. Por ejemplo, reduciendo los excedentes del sector agroalimentario e identificando alternativas para aprovecharlos.
Según los primeros resultados de la investigación, los agricultores pierden el 7,10% de las cosechas porque no se llegan a recoger, por plagas, mal tiempo o por no cumplir los estándares de calidad. Entre los ganaderos, este porcentaje se reduce al 3,7%, debido a que la producción está en mal estado, resulta dañada o porque no se adecúa a las exigencias del mercado. En ambos casos, la mitad de los productos se desperdician. Por otro lado, la industria pierde el 5,36% de la comida que procesa. Una quinta parte va directa a la basura.
Publicidad
El Gobierno vasco seguirá estudiando el desperdicio alimentario en los canales de venta y en los domicilios. «La producción de alimentos tiene un impacto en el medio ambiente que va a crecer porque la demanda irá en aumento y no nos podemos permitir el lujo de desperdiciar comida», aseguró Madariaga.
Consejos para reducir el desperdicio alimentario
-
1 Consumir de forma responsable. Planificar los menús semanales para evitar comprar más de lo necesario.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión