Radicales atacan la tumba de Fernando Buesa

La tumba del líder socialista Fernando Buesa apareció este jueves manchada de pintura roja en el cementerio vitoriano de Santa Isabel. A primera hora de la mañana, responsables del camposanto comunicaron a la familia de quien fue diputado general de Álava, consejero vasco de Educación y vicelehendakari que el pateón había sido atacado por desconocidos. Precisamente, este año se han cumplido veinte años desde que la banda terrorista ETA hiciese explotar la bomba que le asesinó junto a su escolta Jorge Díez Elorza. Un hecho que conmovió a toda la sociedad y generó una ola de rechazo que tuvo su reflejo en la mayor manifestación que se recuerda en Vitoria.

«Fue un hombre de paz. Defendió la libertad de todos con la palabra». Esa es la frase que aparece en el epitafio de la tumba de Buesa que ha quedado cubierta por pintura. La familia del dirigente del PSE ha mostrado que está profundamente «disgustada y triste» ante este suceso. «El odio se combate con amor y el mal con el bien. El silencio y la inacción revictimizan. Defender la libertad y combatir el odio es cosa de todos», apuntó su hija menor, Sara, que es vicepresidenta de la Fundación.

Desde la Fundación que lleva el nombre de Fernando Buesa y que trata de que no se olvide su legado ni tampoco el del resto de víctimas quisieron añadir que «el discurso del odio sigue presente en nuestra sociedad y lejos de ignorarlo, debemos denunciarlo y rechazarlo sin matices para deslegitimizar el terrorismo». Los compañeros y amigos del líder socialista se sumaron rápidamente a los mensajes de condena por este ataque perpetrado por radicales.

Los mensajes de apoyo a la familia de Fernando Buesa llegaron de compañeros y adversarios políticos. También llegaron desde EH Bildu, que a través de su grupo municipal en Vitoria, mostraron su «rechazo más absoluto» contra el ataque. «Toda nuestra solidaridad para con la familia», apuntó en Twitter la coalición que en el Ayuntamiento de la capital alavesa encabeza Miren Larrion, que en las autonómicas de hace cuatro años ejerció como candidata de la lista soberanista.

En redes sociales, el lehendakari, Iñigo Urkullu, ha manifestado su estupor por este ataque, que «merece un rechazo y una condena sin paliativos, ni eufemismos». Tras mostrar su apoyo a la familia de Fernando Buesa, ha señalado que «atacar una sepultura es repugnante y carente de todo principio humanista. Es un muestra de embrutecimiento y deshumanización». Asimismo, ha opinado que la inmensa mayoría de la sociedad vasca «se avergüenza» de este tipo de actos y defiende una convivencia «basada en el respeto al pluralismo y a los derechos humanos».

El alcalde de Vitoria, Gorka Urtaran, como responsable del cementerio municipal de Santa Isabel, ya ha dado orden de que «cuanto antes» se proceda a la limpieza del panteón. «En esta ciudad no queremos ni violencia ni violentos que vulneran los derechos humanos», subrayó.

La secretaria general del PSE, Idoia Mendia, ha reivincidaco que la figura de Buesa «está muy por encima de la catadura moral de los que pretenden hacer exhibición de su falta de principios democráticos». Unacondena a la que también se ha sumadoel delegado del Gobierno, Denis Itxasao. Y contundente ha sido la reacción de Carlos Iturgaiz, candidato a lehendakari por la coalición PP+Cs. «Las camadas proetarras no descansan, y la profanación del panteón de Fernando Buesa es la demostración de que siguen rematando a las víctimas del terrorismo que ya asesinaron. Todo mi apoyo y cariño a la familia de Fernando Buesa. No nos callarán estas alimañas radicales», ha condenado.

La ministra de Educación, Isabel Celaa, y la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, también han condenado la acción.