El PP vasco convoca sus congresos provinciales entre abril y mayo

El PP vasco empieza a buscar fechas para sus congresos provinciales. La ejecutiva autonómica que lidera Carlos Iturgaiz ha determinado ya que la cita para renovar la dirección de Álava se celebre a finales de abril y que las convenciones de Bizkaia y Gipuzkoa, en ese orden, se programen a lo largo del mes de mayo.

Activada ya la cuenta atrás, toca empezar a hablar de nombres. Aunque no hay anuncio oficial, fuentes de absoluta solvencia confirman que Iñaki Oyarzábal va a aspirar a revalidar su cargo en Álava, igual que Raquel González en Bizkaia. Los dos candidatos 'oficiales' concurrirán como favoritos y parecen en disposición de renovar mandato. Aunque la dirección regional va a hacer un llamamiento a la integración y a «cerrar filas» tras un convulso 2020, tampoco puede descartase absolutamente que aparezcan aspirantes alternativos, especialmente en Bizkaia. Será la primera vez que los afiliados tomen la palabra tras la salida de Alfonso Alonso, el retorno de Iturgaiz y el mal resultado de las autonómicas.

El futuro en Gipuzkoa es bastante más incierto. La presidencia se encuentra vacante desde la dimisión de Borja Sémper en enero de 2020. Borja Corominas, delfín de Sémper y actual portavoz en el Ayuntamiento de San Sebastián, ha presentado dos veces su candidatura, pero no es del agrado de Génova. El veterano José Luis Arrúe, secretario general de la estructura guipuzcoana, es ahora mismo el líder interino, pero en principio no parece que vaya a ser el elegido. Cobra fuerza el nombre de la parlamentaria Muriel Larrea. Está previsto que sean congresos mixtos -presenciales y telemáticos- para adecuarse a las restricciones sanitarias establecidas para frenar la pandemia.

Los provinciales vascos coincidirán en el tiempo con los del resto de España. Los mandatos de los actuales presidentes están a punto de expirar, y a Génova le gusta activar la renovación de todas las direcciones a la vez. La ejecutiva nacional ha pedido que los cónclaves de todas las provincias queden cerrados entre marzo y junio. El 'casadismo' domina ahora mismo el mapa, con algunas excepciones. Por ejemplo, la de Alicante.

Superada esta primera fase, el gran reto de Pablo Casado llegará tras el verano. El presidente del PP anunció hace dos semanas la convocatoria de una convención nacional para reorientar el discurso del partido hacia posiciones más moderadas. Si el viraje va más allá e incluye la refundación del partido, está por ver.

Este año también se deberían haber convocado algunos congresos regionales, por ejemplo el vasco, pero la hoja de ruta de Casado va a obligar a posponerlos. La cita que debe ratificar -o no- la presidencia de Carlos Iturgaiz se celebrará, casi con total seguridad, durante el primer trimestre de 2022.