La descarnada ruptura entre Ayuso y Casado causa un cisma en el PP
Ambos líderes rompen entre graves acusaciones mutuas de espionaje y corrupción y hunden a los populares en la mayor crisis de su historia
La ruptura total entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso es ya un hecho. El Partido Popular se sumergió ayer en un escenario de consecuencias ... imprevisibles tras abrirse en canal. Dos intervenciones inéditas, crudas y sin cuartel de la presidenta madrileña y de Teodoro García Egea certificaron que el cisma es absoluto. Tras ocho meses enfrentados por el control del PP en Madrid todo ha saltado por los aires. La dirección nacional anunció que va a abrir un expediente informativo a su líder más mediática. Lo impensable, su posible expulsión del PP, empieza a ser una hipótesis. La situación de Casado no es mucho mejor. Todo, mientras se cruzan reproches, acusaciones de alto voltaje, insinuaciones de corrupción, detectives privados... El PP entra en una fase desconocida.
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Dos relatos para justificar una guerra
La filtración de un supuesto espionaje que habría sufrido la presidenta madrileña por encargo de altos cargos del partido y las sospechas sobre presuntas mordidas cobradas por su hermano han derivado en una guerra de poder que se ha cobrado su primera víctima, Ángel Carromero, mano derecha del alcalde de Madrid y una persona muy cercana a la cúpula popular.
El origen está en un contrato adjudicado en abril de 2020 para la adquisición de mascarillas FPP 2 y FPP3 a la empresa Priviet Sportive SL por un valor de 1,5 millones de euros. El dueño de la sociedad es un amigo de la presidenta de Madrid y de su hermano Tomás, quien según Génova habría cobrado una comisión de 280.000 euros. La dirección del PP, en todo caso, no tiene pruebas.
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Presidenta de Madrid
Acusa al líder de instigar una campaña falsa y «cruel» por corrupción contra ella
LAS FRASES DE ISABEL DÍAZ AYUSO
Acusaciones
«Pido que se depuren responsabilidades tanto en el partido nacional como en el partido regional»
Batalla interna
«Las declaraciones del entorno de Pablo Casado son lo peor que se puede esperar de los políticos»
Reunión con el presidente
«Casado me dijo que tenía conocimiento del contrato, que pensaba que era ilegal y que el dosier se lo había filtrado Moncloa»
Aclaración
«Pregunté a mi hermano. Me dijo que había tenido relación comercial con esa empresa y que era todo legal»
Ayuso defiende que todo es un plan para destruirla políticamente y reclama que Casado depure responsabilidades a todos los niveles. En su entorno dan credibilidad al supuesto intento de espionaje contra ella que este miércoles desvelaron 'El Confidencial' y 'El Mundo' y del que tuvo conocimiento, dijo, en diciembre. La operación habría sido elaborada tras la pantalla de la sociedad municipal de vivienda de Madrid, en la que trabajaba Carromero.
La primera en salir a escena fue Díaz Ayuso. En una comparecencia sin preguntas a las 13.00 horas en la Puerta del Sol, sede del Ejecutivo madrileño, acusó a la dirección nacional de actuar de modo «cruel» e «injusto». «No puede haber nada más grave que acusar a alguien de la propia casa, con responsabilidades de Gobierno, de corrupción. Y hacerlo sin pruebas».
Acusaciones «gravísimas»
La respuesta se la dio dos horas después García Egea. El secretario general del PP comparecía a las 15.00 horas en Génova y anunciaba que las «acusaciones gravísimas, casi delictivas» lanzadas por Ayuso empujaban a la dirección nacional a abrirle un expediente informativo que podría suponer su expulsión del partido e, incluso, acabar en los tribunales. Los servicios jurídicos de la formación conservadora están estudiando si inician acciones judiciales contra la líder madrileña. «Nunca pude imaginar que atacara de una forma tan cruel e injusta a la dirección de un partido que le ha dado todo», lamentó García Egea. Quien mejor definió ayer cómo está el ambiente fue José María Aznar. «La situación en Ucrania es mejor que en el PP, porque allí no hay armamento nuclear». Cayetana Álvarez de Toledo pidió directamente la dimisión de Casado.
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Dirección del PP
Le abre expediente por el contrato de su hermano y amaga con enviarla a los tribunales
Las frases de Teodoro García Egea
Contraataque
«Ha vertido acusaciones gravísimas, casi delictivas, contra el presidente y toda la formación»
Sospechas
«Que nadie use las siglas del PP para blindarse ante problemas en los que pueda verse envuelto»
Cita en génova
«Casado convocó a Ayuso para ponerle al corriente de los hechos y ella se comprometió a aclararlo de forma inmediata»
Investigación
«No hemos contratado a detectives o a un agente externo. Lo único que hemos recibido es una campaña de infundios»
La tormenta desatada rompe una relación de años y certifica cómo la tensión ha ido en aumento en los últimos meses. El principal motivo del desencuentro ha sido la intención de Ayuso de postularse como presidenta del PP en Madrid a raíz de su abrumadora victoria en las elecciones autonómicas del año pasado. Ayuso se sintió reforzada, Génova no lo veía y ambas partes se han ido lanzando órdagos hasta que todo ha estallado.
Lo sucedido demuestra hasta qué punto la relación entre Casado y Ayuso se ha ido deteriorando de forma significativa en pocos meses. Ambos se conocieron desde que la entonces joven periodista, en 2004, entró en las Nuevas Generaciones del PP. Él era el líder de la fuerza juvenil en Madrid; ella, militante de base. Siguieron rumbos paralelos cobijados por Esperanza Aguirre y José María Aznar. El hoy líder del PP se convirtió en jefe de gabinete del expresidente y en 2011 obtuvo el premio de un escaño en el Congreso. La presidenta madrileña se fajó en los vericuetos de la política regional hasta que Cristina Cifuentes la hizo viceconsejera en 2017.
Ella estaba en el equipo de Casado para las primarias y el congreso que le auparon al liderazgo del PP en 2018. En las fotos de aquellos días es la única mujer del núcleo duro del 'casadismo', aunque, como siempre, en segunda fila. El ya presidente de los populares sorprendió a propios y extraños al designarla candidata en la Comunidad de Madrid para las autonómicas de 2019. Era casi una desconocida, incluso para los conocedores de la vida política regional. Todo fue bien, dicen en el equipo de Casado, hasta la irrupción de Miguel Ángel Rodríguez. Lo que era una amistad a prueba de bombas empezaba a deshilacharse.
Hasta que ha llegado el lodazal del espionaje, las filtraciones, la malversación, prevaricación, contratos turbios... A estas alturas, dicen en el PP, de los dos solo uno puede quedar en pie.
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