Podemos e IU sondean a Más País para concurrir juntos a las municipales y forales vascas

«Hay que ir poco a poco», defienden las fuentes consultadas por este periódico. Una vez que la vicepresidenta segunda del Gobierno ha confirmado que su proceso de escucha está a punto de reactivarse, pero que Sumar no se estrenará como marca hasta las generales -en diciembre de 2023, según ha anunciado Pedro Sánchez este mismo mes-, las diferentes formaciones que pueden acabar integradas en el frente amplio a la izquierda del PSOE tienen que empezar a tomar posiciones y decisiones de cara a los comicios de primavera.

En Euskadi las piezas deben ir encajando una a una. La principal es Podemos, a la que la bombona de oxígeno que puede aportar Díaz le ha llegado en el momento más oportuno. La pugna electoral de tú a tú con el PNV de los inicios queda ya lejos, y las encuestas revelan un apoyo decreciente. En el seno de la formación morada lo atribuyen a la desafección política de la sociedad que dispara la abstención, pero lo cierto es que el auge de EH Bildu, con su nuevo perfil social e influyente en Madrid -gracias en parte a Podemos-, también está haciendo mella.

La estrategia de la formación que lidera Pilar Garrido de cara al nuevo ciclo electoral vasco es clara, en consonancia con los planes de Yolanda Díaz: «Es absurdo no juntarnos si eso nos permite tener más peso». Pese a las tensas relaciones que mantienen a nivel nacional tras el fiasco de la candidatura en Andalucía, Podemos Euskadi y Ezker Anitza-IU van a seguir de la mano en el territorio y revalidarán su coalición para las municipales y forales, según han confirmado portavoces de ambas formaciones.

A partir de ahí, se buscan nuevos socios en un espacio muy atomizado. Coserlo requiere paciencia pero se considera imprescindible. Para empezar se mira a Más País, que en las generales de 2019 obtuvo en Bizkaia 8.542 votos. En julio ha concluido el proceso para conformar su marca vasca: Euskadi Eraiki ya ha sido dada de alta, tiene una pequeña estructura orgánica y una hoja de ruta plasmada en un documento político. Los primeros contactos informales con Podemos e IU han servido para «abrir el canal de comunicación» y para tantear el interés de la nueva sigla por colaborar.

La actual dirección de Podemos Euskadi fue leal a Pablo Iglesias y lo será, ya lo ha demostrado, a Yolanda Díaz. Un escenario que abre desde ya la puerta a la reconciliación con el 'errejonismo', que tuvo durante años uno de sus grandes bastiones en Euskadi. Íñigo Errejón ve con buenos ojos el liderazgo de Díaz, compartieron acto en Andalucía y ha subrayado la buena relación que mantienen, pero cerrar la herida con los mandamases del partido que fundó es un paso que aún no está claro que esté dispuesto a dar de inmediato.

El cuarto protagonista en este proceso es Equo-Berdeak. La formación ecologista firmó en 2019 un acuerdo de colaboración con Más País a nivel nacional que provocó su salida de la coalición Elkarrekin Podemos y le obligó a presentarse en solitario en las autonómicas del año siguiente. La candidatura que lideró José Ramón Becerra obtuvo casi 12.000 votos, cifra que permanece estable desde hace una década, pero no pudo revalidar su escaño en el Parlamento vasco.

Pese a la ruptura de hace tres años, portavoces de Equo aseguran que el acuerdo de colaboración con Podemos e IU a nivel foral y municipal «sigue vigente», por lo que podría revalidarse «sin problemas». Los ecologistas no han sido aún invitados oficialmente a sumarse al nuevo proyecto, que aspira a presentar a sus candidatos en otoño. La formación verde no lo descarta, pero advierte de que la conversación debe ir «más allá de las listas» y que las condiciones para aliarse no son las mismas de antaño. El ecologismo, sostienen, ha escalado posiciones en la lista de preocupaciones sociales y de prioridades de los partidos de todo el arco político, por lo que creen que Equo, con su amplia experiencia, debería tener mayor protagonismo.