La oposición registra enmiendas por 1.500 millones a un Presupuesto «insuficiente»
Azpiazu acusa a Bildu, Elkarrekin Podemos-IU y PP+Cs de rechazar una «negociación real» por la cercanía de los comicios municipales y forales
Una vez constatada la falta de entendimiento para ensanchar los apoyos a un proyecto garantizado de antemano por la mayoría absoluta de PNV y PSE- ... EE, los Presupuestos vascos para el año que viene encaran ya la recta final para su aprobación, que se producirá el 23 de diciembre. El plazo para registrar enmiendas concluyó ayer con un balance esclarecedor sobre la distancia existente entre el Gobierno y la oposición: cuatro correcciones a la totalidad y otras 711 parciales por valor de 1.483 millones de euros, un montante que haría variar más del 10% de las Cuentas diseñadas por el consejero Pedro Azpiazu.
EH Bildu no reeditará el acuerdo presupuestario sellado el año pasado al entender que el proyecto para 2023 está «caducado» y no lleva a cabo «cambios estructurales». La portavoz parlamentaria, Maddalen Iriarte, lamentó ayer que el Gabinete de Iñigo Urkullu no haya sido «sincero» en una negociación repleta de «excusas». La coalición soberanista ha presentado 95 enmiendas por un importe total de 450 millones; entre sus propuestas, extender de forma «progresiva» las ayudas de 200 euros mensuales por hijo hasta los 18 años, ampliar el parque público de alquiler de vivienda, hacer gratuito el transporte público para menores de 12 años y extender el bono energético.
Lamenta que el Gobierno no haya sido «sincero» en una negociación repleta de «excusas»
Elkarrekin Podemos-IU eleva la factura de sus 158 enmiendas hasta los 763 millones, que servirían sobre todo para reforzar los servicios públicos. Y es que los morados denuncian que más de 1.000 millones del proyecto presupuestario están destinados a conciertos educativos y sanitarios. Por ello plantean «revertir la externalización» especialmente en Osakidetza. La portavoz del grupo, Miren Gorrotxategi, tachó de «insuficientes» las Cuentas teniendo en cuenta que la inflación «se come el pequeño incremento» en la cuantía global y asumió el desacuerdo con el Gobierno vasco bajo la premisa de que no comparten el «modelo político y social» que dibuja el proyecto.
«Clave preelectoral»
Las dos formaciones de izquierdas se sumaron así ayer al paso dado el viernes por PP+Cs, que formalizó su enmienda a la totalidad y presentó otras 400 parciales valoradas en 270 millones. La alianza de conservadores y liberales hicieron de la bajada de impuestos su principal caballo de batalla en las negociaciones, pero la negativa del Ejecutivo autonómico a adelantar el debate sobre la fiscalidad hizo encallar las conversaciones. Por su parte, Vox también ha enmendado a la totalidad el Presupuesto, pero ha renunciado a registrar correcciones parciales al entender que el Gobierno las trata como «basura».
Asume el desacuerdo con PNV y PSE bajo la premisa de que no comparten «modelo político y social»
Al otro lado, el consejero de Economía y Hacienda defendió ayer haber hecho un «ejercicio sincero» para tratar de incrementar los apoyos a las Cuentas más allá de la mayoría PNV-PSE. Azpiazu, que intervino en el acto 'La noche de la empresa vasca' en Bilbao, lamentó que «la clave preelectoral de los partidos», a seis meses de los comicios municipales y forales de mayo, haya impedido una «negociación real». «Me gusta decir que la ideología ha de ser tamizada por la realidad», recetó.
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